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Carlos Sainz defiende su triunfo en Argentina de 2002 y aspira a seguir a los líderes

El piloto español Carlos Sainz (Citroen Xsara) tratará de recuperar el terreno perdido en Nueva Zelanda durante la disputa del Rally de Argentina, quinta prueba puntuable, que se disputa entre el jueves y el domingo, y en la que el madrileño defiende la victoria conseguida la temporada pasada.

L D (EFE) Tras la disputa de las cuatro primeras carreras (Montecarlo, Suecia, Turquía y Nueva Zelanda), el líder del Mundial de pilotos es, a pesar de no haber ganado carrera alguno, el inglés Richard Burns (Peugeot 206) con 26 puntos, seis más que su compañero de equipo el finlandés Marcus Gronholm -ganador en Suecia y Nueva Zelanda. Burns tiene nueve puntos mas que el francés Sebastien Loeb -vencedor en Montecarlo- y el escocés Colin McRae, ambos con Citroen Xsara, y diez de ventaja sobre el compañero de éstos, Carlos Sainz -ganador en Turquía-.

El español tiene un buen bagaje de resultados en la cita suramericana, en la que ha logrado ocho podios en doce participaciones: dos victorias (en 1991 y 2002), cinco segundos puestos (en 1990, 1992, 1994, 1996 y 1998) y un tercero (2001). Para Sainz Argentina "es un poco como correr en casa" y considera que las especiales de esta prueba "son una mezcla de muchos tipos de superficie. Hay zonas muy bacheadas, otras más rápidas y otras más o menos rompedoras o difíciles. Se podría comparar con las especiales de Portugal". "Me gusta este rally y sus especiales. Aunque hay algunas nuevas, esto no debería hacerme cambiar de opinión; seguramente serán muy al estilo argentino", agregó el español.

Sainz es consciente de que el equipo Citroen participa por primera vez en Argentina, "y eso es una incógnita". "Pero no veo razón para que no seamos competitivos. Espero que podamos luchar por el podio e incluso por la victorias", señaló. Una de las principales dificultades que se encontrarán los participantes será la altitud por la que transcurre la carrera, que llega a los 1.600 metros, aunque en otras ediciones se han superado los 2.000. Esto supone una verdadera prueba de fuego para los motores de los WRC, ya que su potencia se ve seriamente mermada por la reducción de la presión barométrica, lo que representa cerca de un 30 por ciento menos (unos 100 CV).

En la edición de este año el recorrido se ha hecho más compacto y todos los tramos se concentran en el área norte de Villa Carlos Paz, sobre todo en la región del valle Punilla. También habrá especiales al sur de Ischillin, en donde no se corre desde 1997. El recorrido total del rally será de1.379,61 kilómetros, 388,94 de ellos correspondientes a 25 tramos cronometrados: trece en la primera etapa (jueves y viernes), nueve en la segundas y sólo tres en la tercera y última.

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