L D (EFE) "Siempre es lo que he valorado a la hora de tomar decisiones en mi carrera deportiva. Hasta ahora esas decisiones me han mantenido ligado al Estudiantes, de lo cual estoy muy orgulloso porque el trato ha sido cordial, pero ahora la situación ha cambiado y no quiero continuar", afirma Jiménez.
"Son cosas personales en las que no quiero entrar por respeto al Estudiantes y por todos los años que he estado ahí y lo bien que me han tratado siempre. No quiero llevarlo a lo personal. Sé que es difícil de entender, pero sólo pido que se respete mi decisión, porque se está olvidando todo lo que ha sido mis años ahí, mi actitud y mi comportamiento. Y me da pena que ahora sólo se mire lo profesional y se olvide lo personal. Yo he renunciado a cosas por estar en el Estudiantes y he tenido una serie de detalles durante estos años que espero que sirvan de algo", añade.
Carlos Jiménez reitera su voluntad de dejar el Estudiantes y de marcharse al Real Madrid, pero el conjunto del Ramiro de Maeztu no está dispuesto a dejar marchar a su jugador sin que el club blanco abone los 3,6 millones de euros de la cláusula de rescisión que liga al alero madrileño al equipo colegial hasta 2010. "Yo acepté la cláusula porque en ese momento no me planteaba abandonar Estudiantes. Me daba lo mismo más o menos. La cláusula era exagerada y se sabía que nadie podía pagarla, como se ha demostrado ahora, pero era porque entonces había un sentimiento de que era para todos los años que me quedaban. Pero la situación ha cambiado. Sé que sobre el papel hay un contrato pero también hay cosas que han cambiado en Estudiantes y quiero marcharme", indica Jiménez al respecto.
El alero estudiantil, de 29 años, manifiesta también que, en su opinión, "todas las partes pueden salir beneficiadas en este asunto", pero señala que no se llegará a un acuerdo si "cada uno tira de la cuerda en su propio beneficio". "Yo creo que todos tenemos una buena situación en el horizonte, lo que ocurre es que todos queremos sacar el máximo a nuestras posibilidades y es muy difícil acercarse cuando cada uno tira de la cuerda para su lado", asegura.
Sobre sus declaraciones en las que aseguraba que no jugaría "al cien por cien" si el Estudiantes le obligaba a permanecer en el equipo, Jiménez matiza que sus palabras no respondían "a un acto premeditado", sino a su difícil situación personal. "Yo no he sido capaz de olvidarme de todo esto porque soy una persona y como vivo una situación desagradable, me afecta. Lo de no jugar al cien por cien no es algo premeditado. No voy a salir a jugar y hacerlo mal porque respeto a mis compañeros y a Estudiantes. Pero antes de deportista soy persona y si la persona no está agusto no rinde el deportista. Creo que nadie es capaz de rendir si no está agusto y yo no estoy agusto ahí", responde.
Jiménez también dice ser consciente de que su decisión no gustará en la afición estudiantil, pero indica que su caso difiere de otros porque su voluntad no era la de marcharse al Real Madrid, sino la de dejar el Estudiantes. "Creo que hay una pequeña diferencia con respeto a casos anteriores, porque yo no pretendo salir de Estudiantes para irme a un equipo en concreto. Yo planteo marcharme pero sin ninguna oferta concreta, simplemente porque no estoy a gusto. Luego tuve la suerte de recibir varias ofertas y todas ellas buenas. Sé que no puedo tener a todo el mundo contento con mis decisiones y tampoco lo pretendo", concluyó.