L D (Europa Press) Carlos Jiménez reconoce que acudió este lunes a cumplir con lo establecido. "Vengo para estar con mis compañeros por ahora y hablar también con Juan Antonio Orenga para ver qué ideas tiene, qué hacemos y sobre todo para intentar tranquilizar la situación", señaló.
"Es un día raro, vengo aquí, pero saben que no quiero jugar aquí. Es lo que sabe todo el mundo, parece que el problema es económico y poco puedo hacer. A disgusto nadie está bien en ningún lado", apuntó el alero español.
Jiménez, que no brilló en el pasado Eurobasket, tiene claro cuál será su futuro, que no es otro que jugar en el Real Madrid. "No voy a irme donde me diga Estudiantes. He tomado una decisión y es continuar en Madrid. No me lo merezco y en eso voy a ser tajante", recalcó, respecto a las posibles negociaciones con Tau Cerámica.
El internacional aseguró que cuenta con el respaldo del que será su nuevo equipo, el Real Madrid. "Me ha mostrado su apoyo, que no me van a dejar en la estacada. Toda la confianza me viene bien", aseguró.
Hay que recordar que el Estudiantes quiere que se abone la cláusula de rescisión, que asciende a 3,6 millones de euros, para cerrar su salida del Ramiro, después de que hace dos años renovara hasta 2010 con los colegiales y mejorara sustancialmente su ficha. "Entiendo todo, pero estamos hablando de un dinero que para el baloncesto es desorbitado. No voy a ir donde más dinero den a Estudiantes. La solución está clara, he tomado la mejor solución para mí, y para que ellos salgan beneficiados, pero no les voy a tener a ellos en cuenta", concluyó.