L D (EFE) El director de juego de la selección española, de 27 años, firmó en verano un nuevo contrato con la franquicia canadiense por cinco temporadas y 40 millones de dólares, toda una declaración de confianza realizada por los Raptors hacia un jugador que hizo su mejor papel en la Liga la pasada campaña, con más de 11 puntos y ocho asistencias por partido. "Estoy encantado y ahora tengo la confianza de la organización, de entrenadores y del resto, sólo tengo que dedicarme a lo mío, que es jugar y disfrutar con el baloncesto, no tengo que pensar en nada más", comentaba Calderón tras la derrota de sus Raptors frente a los Lakers, en un amistoso disputado el domingo pasado.
Sam Mitchell, técnico del conjunto de Toronto, puso a Calderón como base titular en 56 partidos de la temporada 2007/08, debido a las lesiones que sufrió Ford, involucrado este verano en un traspaso que acabó con él y el pívot esloveno Rasho Nesterovic en los Pacers de Indiana, a cambio del ala-pívot Jermaine O'Neal. "Me despedí de él (de Ford) cuando aún no sabíamos si íbamos a seguir en el equipo", manifestaba el extremeño, cuya rivalidad deportiva con su ex compañero nunca fue más allá de la pista. "La relación siempre fue buena, jamás hubo ningún problema entre nosotros, al contrario", agrega.
Calderón considera que, como colectivo, el principal objetivo de su equipo con vistas al comienzo de la nueva temporada es superar la primera ronda de las eliminatorias por el título, un logro sólo alcanzado por los Raptors en la temporada 2000/01, cuando doblegaron a los Knicks de Nueva York. "Con las incorporaciones que tenemos deberíamos dar ese paso", ha dicho en alusión al fichaje de O'Neal y de jugadores como Hassan Adams, el croata Roko Ukic o Willie Solomon, ex miembro del Fenerbahçe o del Maccabi Tel Aviv. "O'Neal se ha integrado muy bien, es el jugador que necesitábamos para lograr un juego interior más potente; con él y con (Chris) Bosh abajo vamos a estar bien servidos, harán un gran trabajo y va a ser más fácil para todos", explicaba el base español.
En el plano individual, el extremeño, a una semana de comenzar la competición, frente a los 76ers de Filadelfia, espera seguir mejorando y volver a rayar a la misma altura que cuando fue titular la temporada pasada. "Cuando llegué no esperaba lograr todo esto", admite Calderón. "Los primeros años fueron complicados, pero con trabajo, paciencia y creyendo en uno mismo, las cosas, por suerte, han salido bien y deportivamente no puedo pedir más: soy titular en la NBA, en un equipo con aspiraciones. Es lo máximo", afirma.
El internacional español, medalla de oro en el Mundial de Japón y plata en los Juegos Olímpicos de Pekín, cree que la selección nacional seguirá dando alegrías por mucho tiempo: "No veo el final de ciclo", dice. "Tenemos a gente joven y algunos seguimos ahí, hay que seguir ese camino, tenemos una generación muy buena y estamos preparados para hacerlo bien", asegura.
Algunos de esos compañeros a los que se refiere, como Marc Gasol y Rudy Fernández, debutan esta temporada en la NBA, y Calderón augura a ambos grandes éxitos en esa Liga. "Marc ya es titular y tendrá minutos, no hay muchos jugadores como él, y Rudy, si le dan confianza y minutos, va a demostrar lo buen jugador que es, tiene una calidad increíble y puede hacer lo que quiera en esta Liga", manifestaba el español, que también espera grandes cosas de Sergio Rodríguez en Portland: "Ojalá pueda estar a tope y hacerlo bien".
A la pregunta de si volvería a España para concluir su carrera, tal y como desea hacer su compatriota en los Lakers, Pau Gasol, el extremeño comenta: "No me gusta pensar a tan largo plazo pero me quedé con ganas de ganar alguna cosa más allí. Creo que sí que acabaré jugando allí, pero no es algo que haya pensado".