Un duelo clásico se dirimió estos pasados días en Vitoria. Podéis pensar que hablamos del Madrid – Barça de cuartos de la Copa.Pues no vais desencaminados pero, en concreto, me fijo en el duelo de banquillos que mantuvieron Pascual y Laso.

Es complicado decir quién es mejor entrenador, porque no está claro. No es demostrable saber quién está por encima del otro. Es verdad que en la Copa parece ganador Pascual. Eliminó en tres días a tres de sus mejores colegas, Laso, Tabak y Perasovic, pero no parecemos tener base científica para saberlo con certeza.

Ahora bien, debemos decir que en el partido del otro día vimos una magistral partida de ajedrez entre dos grandes técnicos. Continuas jugadas para desestabilizar, o intentarlo, al otro. Giros increíbles de partido, tendencias a defender, atacar, cargar el rebote. Llull, aunque desacertado, para desestabilizar el ataque blaugrana; Sada para defender a Chacho; Todo valía en segundos, en minutos eternos.

Reivindicamos a lo español en la gran batalla dela Copa. Los dos técnicos llevarán alto a Barça y Madrid esta temporada como ya lo hicieron en la pasada. No son croatas, serbios, eslovenos, italianos, no vienen de la escuela norteamericana. Pero son buenos, se han currado su trayectoria profesional y han conseguido hacerse un hueco. Nos tenemos que sentir orgullosos.

No me extrañaría que, con el paso de los años, estén en las quinielas para ocupar el cargo de seleccionador nacional. Seguro que ya lo han estado, al menos en la baraja de nombres, pues son entrenadores top. Que Pascual salió más reforzado que Laso, sí. Pero no es óbice para decir que Pablo Laso es un enorme entrenador, injustamente tratado. En otro artículo trataremos eso, porque que Laso sea criticado, es de un enorme mal gusto.

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Dani Blanco en twitter @blancopineda

(Fotos: ACB)