La FIBA ha decidido suspender y dejar fuera del Mundial de Baloncesto en China a los árbitros que este sábado dirigieron el partido Francia-Lituania (78-75), entre los que se encontraba el español Antonio Conde, y que acabó decidiéndose a favor de los galos por un clamoroso error arbitral en los últimos segundos.
Con 76-75 a favor de los bleus y 15 segundos por jugar, Jonas Valanciunas lanzó un tiro libre y falló. Sin embargo, debió ser el empate a 76 porque Rudy Gobert cometió una interferencia ilegal, pues el jugador de los Utah Jazz, tocó aro y red en la acción. Lo que resulta más increíble es que el trío arbitral (además de Conde, el partido fue dirigido por el venezolano Daniel García Nieves y el argentino Leandro Lezcano) decidiera no revisar la acción.
La FIBA no ha tardado en tomar cartas en el asunto y, a través de un comunicado, ha señalado que "la decisión correcta debería haber penalizado la interferencia de la canasta y otorgar un punto a Lituania".
Lo cierto es que si Lituania hubiese ganado el partido, este lunes habría tenido la oportunidad de llegar a cuartos de final dependiendo del resultado de su partido ante la República Checa y el del Francia-Australia.
"No necesitas ser inteligente. Debes ser honesto", decía el sábado el seleccionador de Lituania, Dainius Adomaitis, en la rueda de prensa después del partido disputado en Nanjing. "Detén el juego y ve a ver lo que sucedió en esa jugada", se quejaba.
Adomaitis dice que sus jugadores merecían algo mejor: "Estos muchachos pasan todo el verano, dos meses sin familias. Reciben cero dólares. Cero. Exijo mayor respeto por ellos. Pero alguien no respeta este juego. Esto es una jodida broma".