Caer 3-0 ante el Fenerbahce en la Euroliga no ha sentado nada bien en el Panathinaikos griego. La afición está disgustada, los jugadores del español Xavi Pascual también, pero el que más ha clamado al cielo por la eliminación ha sido su presidente, Dimitris Giannakopoulos. La decisión del mandatario al caer en Estambul fue la de anular los billetes de vuelta a Atenas.
La batalla abierta por el presidente con su órdago aéreo ha sido respondida por los jugadores que no se han movido de Estambul con la amenaza clara de pagarse ellos mismo un billete de vuelta a Atenas. La situación es caótica y están enzarzados en un conflicto que, además de ser peligroso para el bienestar del club, se está produciendo fuera de Grecia.
La idea de Dimitris Giannakopoulos es la de que el equipo vuelva hasta Atenas en autobús, algo a lo que se niega la totalidad de la plantilla.