Primero Dennis Rodman y ahora Ricardo González Dávila. Como la exestrella de la NBA, este joven entrenador español, conocido como Richi, también se ha dejado seducir por los cantos de sirena de Kim Jong-un, el dictador de Corea del Norte que, por antojo, decidió en su día que allí los mates valen tres puntos y los triples limpios, cuatro, entre otras surrealistas reglas.
Lo cierto es que González Dávila, que el pasado mes de abril se declaró "muy madridista" en una entrevista al portal solobasket.com, dirigirá a partir de ahora a la selección de baloncesto femenino de Corea del Norte. Una aventura en el extranjero que no es nueva para él, pues en 2013 ya llevó las riendas del combinado nacional de Chile, también en categoría femenina, consiguiendo varias medallas.
La última aventura de Richi fuera de España ha sido este mismo año en la Libobasquet de Bolivia, dirigiendo a La Salle de Cochabamba. El técnico comenzó su andadura en los banquillos en el baloncesto madrileño, trabajó con la Federación y dirigió en la LF2 a Majadahonda y al Burgos, ascendiendo a la LF con este último equipo. Ahora estará al frente de las jugadoras de baloncesto que representan al país más hermético del mundo.
Otro dato más sobre González Dávila: está casado con la base Lidia Mirchandani, que militó en las filas del CB Islas Canarias, Ros Casares Valencia y CB Conquero.
Cabe destacar también que Richi no será el primer español que trabaja a las órdenes del dictador Kim Jong-un, que desde el año 2000 tiene a sus servicios a Alejandro Cao de Benós. Este político y periodista tarraconense, de 42 años, ejerce actualmente como portavoz para el extranjero del Gobierno de Pyongyang, y ahora tendrá a otro compatriota en la nación más secreta a la par que sancionada del planeta.