Se trata sin duda de uno de los grandes bochornos del baloncesto español en su época más reciente. Y, sin embargo, la lamentable tángana producida este pasado domingo en Miribilla entre jugadores del Bilbao Basket y el Laboral Kutxa vitoriano, podría quedar resuelta con apenas una multa económica.
Así se desprende de la información publicada por el periodista Lucas Sáez-Bravo, colaborador del programa temático sobre baloncesto de esRadio, Tirando a Fallar, según la cual el alto mando de la ACB, tras repasar precedentes similares, sospecha que la sanción a tan lamentable acto no irá más allá de lo monetario.
Y es que el comunicado emitido este lunes por la propia ACB condenando los hechos y explicando los próximos pasos previos a la imposición de las sanciones a los implicados deja ya bastante patente que difícilmente se impondrá un castigo ejemplar, toda vez que sólo se irá a la sanción deportiva y no sólo económica si el Juez Disciplinario de la ACB, Juan Ramón Montero, considerara lo ocurrido como "muy grave", algo con lo que en principio no se cuenta en la Calle Iradier, sede de la Asociación de Clubes de Baloncesto, a tenor del precedente más parecido existente, juzgado por el propio Montero, tras otra pelea en Real Madrid-Estudiantes en 2004.
Ello, unido a la redacción del acta, hace creer a los clubes implicados, y a la propia ACB, que el castigo no pasará de lo pecuniario. La única opción para ello sería la posible irrupción en el caso de la Comisión Antiviolencia, hecho no descartable dado que incluso varios espectadores se vieron implicados en el acontecimiento más reprobable de la época reciente del baloncesto español.