![Jayson Granger da al Unicaja su primera victoria en el Top 16 de la Euroliga El uruguayo acabó con 29 puntos y 34 de valoración. Por los rusos destacaron Thompkins (27 puntos) y Rochestie (24).](https://s.libertaddigital.com/images/trans.png)
El Unicaja ha logrado su primera victoria en el Top 16 de la Euroliga ante el Nizhny Novgorod, cortando así una racha de nueve derrotas consecutivas, y todavía sueña con un milagro para acabar entre los cuatro primeros y disputar los cuartos de finalo.
El conjunto malagueño no empezó bien el encuentro, excesivamente responsabilizado, lo que aprovechó el equipo ruso liderado por el base estadounidense Rochestie (7-16, m.6). El técnico del Unicaja, Joan Plaza, solicitó un tiempo muerto para templar los ánimos y rebuscar ideas para intentar reaccionar. Le sirvió porque entre el alero lituano Mindaugas Kuzminkas y el base uruguayo Jayson Granger, junto con el ala-pívot estadounidense Caleb Green, salvaron un primer aviso (22-23).
A partir de ese momento, el Unicaja cambió por completo y la defensa fue el detonante de que Kuzminskas pusiera por delante a su equipo (29-18, m.13). El Niznhy se había evaporado, pero peleaba cada balón con el pívot Parakhouski, inconmensurable dentro de la zona. Granger situó la máxima ventaja del Unicaja (38-30, m.17) y le dio un colchón hasta el descanso (46-41), con el uruguayo excelente al firmar 18 puntos y 17 de valoración, mientras que Green (11 puntos) hacía de escudo.
El Unicaja continuaba muy concentrado, sin darle opción al rival y con Green con 16 puntos (63-50, m.28). El Nizhny acusaba la presión y el desconcierto en algunos momentos, aunque posee jugadores de calidad como el pívot estadounidense Thompkins y su compatriota Rochestie, que intentaban acercar a su equipo en el electrónico (63-57, m.29). Un tiempo muerto cajista cortó el parcial de 0-7 del rival y selló el tercer período con una ventaja de siete puntos (64-57).
Pero el Nizhny no iba a dejar escapar cualquier ocasión. Trey Thompkins y Taylor Rochestie son dos excelentes jugadores que, uno con sus lanzamientos y el base con su dirección y liderazgo, junto con su poder ofensivo, lideraron el intento de remontada (66-66, m.33). El Unicaja había bajado su nivel, tomando algo de respiro por el gran esfuerzo físico realizado. Poco a poco fue tomando aire, cerrando filas en defensa y seleccionando el ataque.
Un parcial de 8-0 gracias a Granger (29 puntos y 34 de valoración) y el pívot Fran Vázquez (74-66, m.37) ofreció el primer paso para la victoria, que terminó cimentándose en los tiros libres (85-76). El sueño de los cuartos de final sigue estando lejano para Unicaja pero no es imposible.