El Real Madrid necesita la victoria frente al Barcelona para mantener el liderato

Jugar el día de los Santos Inocentes en el Palau Blaugrana, ante el Barcelona, no es ninguna broma para un Real Madrid que no ha podido saborear el dulzor de la victoria en las últimas ocho visitas al feudo del máximo rival.

Aunque la trascendencia clasificatoria del partido sea casi imperceptible, los duelos entre madridistas y azulgranas, da igual en la pista y en la competición en la que se enfrenten, son más que un partido.

Siempre sirve para calibrar el momento de los equipos y para ir sentando las bases para cuando los enfrentamientos sean verdaderamente trascendentes. Además de dar un alegrón a la afición por ganar al más valorado rival.

La presencia de Sergio Rodríguez, que ha viajado con sus compañeros, en pista es una incógnita que ni el propio protagonista ni su entrenador, Pablo Laso, podrán despejar hasta el mismo comienzo del partido. Todo dependerá de cómo se encuentre el 'Chacho' en el calentamiento y de la marcha del marcador.

"Está entrenándose poco a poco. Está mejor dentro de lo que sabemos que puede ser su recuperación. Va a viajar con el equipo y veremos cómo está para jugar pero no garantizo nada", explicó Pablo Laso.

Claro que si se habla de bajas, parece que el Barcelona va mejor 'servido' en este apartado, con Juan Carlos Navarro, Alex Abrines y Brad Oleson en el dique seco y el fichaje del francés Edwin Jackson como novedad.

"Cuando se enfrentan equipos de tanto potencial seguro que cualquier baja es importante. Para mí, las mías lo son y para Xavi Pascual lo son las suyas, pero los jugadores que salen suelen dar un paso adelante porque son todos muy competitivos y con experiencia", resaltó el técnico blanco.

Tras ocho años sin ganar en el Palau, los jugadores del Real Madrid son conscientes de que una victoria les otorgaría el valor perdido en las derrotas ante el Estudiantes y Bilbao y les impulsaría para adquirir el tono necesario para ir creciendo en el juego.