El despertar en la segunda parte de Juan Carlos Navarro, y en menor medida también de Bostjan Nachbar, iluminó este jueves el camino del FC Barcelona y le condujo a la victoria en el primer partido de las semifinales de la Liga Endesa en la pista de un Valencia Basket entregado, pero exhausto, y negado en ataque en los dos últimos cuartos.
Con esta victoria, el equipo catalán recupera el factor pista y aunque el próximo sábado volverá a jugar en la Fonteta, le bastaría con ganar los dos choques que después se jugarán en el Palau Blaugrana para acceder a la final.
El Valencia saltó a la pista dispuesto a imponer un ritmo acelerado. Lo logró, y aunque fue a costa de multiplicar sus errores, también metió a su rival en esa dinámica. Pero el Barcelona, además de aprovechar la efectividad de Marcelinho Huertas, supo cargar mejor el rebote ofensivo y eso le dio más oportunidades y la iniciativa en un marcador que se mantenía sin grandes diferencias.
El cambio de bases incidió esa dinámica. Oliver Lafayette trató de acelerar, aún más, el juego de los locales, pero se precipitó en exceso y lo pagó en forma de continuas pérdidas. En cambio, Víctor Sada le aportó de todo a su equipo. Anotó, reboteó, asistió y alimentó su ventaja (23-28, m.14).
Los tiros de Lucic sostuvieron al Valencia en sus peores momentos pero fue el regreso de Justin Doellman a la pista y una zona 1-3-1, la que le permitió hacerse con el control del juego. Aun así, el dominio de los aros de Ante Tomic y de Maciej Lampe permitió al Barcelona llegar al descanso con una mínima renta (33-35, m.20).
Los dos equipos regresaron a la pista muy intensos en defensa pero poco acertados en ataque. Y, con ese panorama, dos triples de Juan Carlos Navarro dieron al Barcelona la tranquilidad que era incapaz de encontrar un Valencia que vio cómo sus errores en el tiro le impidieron sacar partido de su esfuerzo por controlar el rebote en su canasta (35-47, m.27).
Negado absolutamente en ataque, los locales se encomendaron a la defensa para tratar de pasar el mal momento y tuvieron recompensa en el último minuto del tercer cuarto, en el que cinco puntos consecutivos, con un triple de Lafayette incluido, le permitieron entrar con alguna opción en el parcial final.
El Valencia se agarró a esa posibilidad, pero con más fe que argumentos, pues no consiguió mejorar sus porcentajes y al Barça se volvió a despegar con la sobria dirección de Sada y los puntos de Nachbar (43-58, m.33).
Con todo en contra, los locales recuperaron la defensa zonal pero el efecto ya no fue el mismo. El esloveno y Navarro supieron agujerearla desde las esquinas y dejaron en nada el despertar anotador de Pau Ribas en el bando local.
Con el Barcelona anotando sin dificultad, ya consciente de su merecida victoria, los locales no dejaron de intentarlo pero sin éxito. Aún así, a falta de un minuto sus aficionados premiaron su entrega con una larga ovación y les animaron a empatar la serie el próximo sábado.