L D (EFE) "Sé que ya no soy el mejor del mundo: hoy el mejor es Alberto Contador. Pero si llegase tercero en Italia y ayudase a Alberto en Francia no podría pedir más", asegura, en una entrevista que publica el diario italiano La Repubblica, el estadounidense, quien ha vuelto al ciclismo profesional más de tres años después.
Armstrong, quien ahora disputa la Milán-San Remo, reconoce que no está en disposición de elegir entre ganar el Giro de Italia o el Tour de Francia, pero que vuelve con las mismas ganas de siempre de hacer un buen papel y con un objetivo muy claro. "En primer lugar, lo hago para que se hable de la lucha contra el cáncer. Y es importante que suceda también en Italia: por esto antes de mayo me reuniré con el presidente (del Gobierno italiano, Silvio) Berlusconi", ha dicho el ciclista.
"Por la mañana, cuando me levanto, a veces soy un poco más lento que antes. Y también los kilos son más, pero esos se pierden. Cuando después me subo a la bicicleta, mi cuerpo me dice que todo está como antes. Ahí estoy verdaderamente bien y se me pasan todas las dudas", ha añadido.
De su vuelta a la actividad ciclista, el estadounidense reconoce que lo más duro ha sido la dieta, el trabajo en el gimnasio y el ritmo duro de entrenamientos, pero si no se sintiera bien, dice, no continuaría con esto.