L D (EFE) "Esto es como un sueño para mi, pero tampoco es el paraíso. Debe ser más fácil ir al paraíso que ganar 7 Tours. Realmente lo que quería era tener a mis hijos a mi alrededor, los seres más importantes de mi vida, en mi última carrera, y terminar de amarillo delante de ellos. El año pasado no pudieron estar aquí", dijo emocionado Lance Armstrong al final de la jornada, en la que se adjudicó su triunfo de etapa número 22.
Armstrong, quien aún no había estrenado su casillero particular en la presente edición, explicó que se empleó a tope "para demostrar que merezco el maillot amarillo, por lo que estoy muy contento con el resultado".
Armstrong, quien aún no había estrenado su casillero particular en la presente edición, explicó que se empleó a tope "para demostrar que merezco el maillot amarillo, por lo que estoy muy contento con el resultado".