Arango se entrena con una máscara especial para proteger la zona maxilofacial

L D (EFE) Cinco semanas después de resultar gravemente lesionado por una entrada del sevillista Javi Navarro, que cumple cinco partidos de sanción por esa jugada, Arango ya corre junto al resto de la plantilla con la esperanza de reaparecer lo antes posible.

 

El jugador, que evitó el quirófano pese a que ingresó en la clínica con traumatismo cráneo encefálico, fractura malar y estallido del labio, confesó que se sintió "incómodo" con la máscara. "Me sentí incómodo al ser ésta la primera vez que la empleaba; además, se me cayó por el sudor, pero tendré que acostumbrarme porque es la única manera de empezar a jugar, ya que de otra manera tendría que esperar dos semanas más", explicó en la rueda de prensa.

 

Añadió que había "adelantado mucho" en su recuperación, y que ha empezado a trabajar fuerte, pero admitió que sólo está al 70 por ciento de su mejor condición física. "Espero avanzar más esta semana y probaré para ver si puedo estar ante el Espanyol. No he hecho mucho fútbol y no estoy para jugar todo el partido, aunque sí algunos minutos", señaló. Arango también opinó sobre los últimos cuatro puntos conquistados por el Mallorca tras el empate ante el Valencia (0-0) y la victoria en Soria ante el Numancia (1-2), que le permiten seguir optando a mantener la categoría. "Los resultados están acompañando –dijo– y todos ven que la actitud ha cambiado, pero para mí ha sido la misma. Hay que seguir así porque necesitamos buenos resultados".

 

Finalmente, ante una pregunta de si iba a cambiar su actitud agresiva en el campo por otra más conservadora tras el codazo de Navarro, respondió: "Claro que no. Me retiraría si tuviera miedo".