L D (EFE) Ancelotti, en particular, se ha quejado ante el Atalanta de la no concesión de una pena máxima por falta sufrida por su defensa Bonera (final primer tiempo, 0-0) y de la "marcha atrás" dada por el colegiado, a instancias de uno de sus jueces de línea, tras haber concedido antes un penalti (caída de Gourcuff). "Se están repitiendo con demasiada continuidad. Lo que está sucediendo al Milán dentro del campo y a sus dirigentes fuera es muy evidente", ha añadido Ancelotti, haciendo clara referencia a que su equipo ha sido, del momento, el único en no sufrir un recorte de penalización por parte de la Cámara de Conciliación y Arbitraje del CONI en el caso de fraude deportivo.
Ancelotti, cuyo equipo no caía en casa del Atalanta desde hacía veintiún años y no había perdido fuera en la actual campaña liguera italiana, también ha reconocido que su equipo tiene "problemas de juego". "Problemas los tenemos, pero somos nosotros los que los tenemos que arreglar y lo vamos a hacer, el técnico no está confuso. Pero también hay problemas que viene de fuera del campo y eso son otros los que deben arreglarlos. Me gustaría pensar que es todo fruto de la casualidad y que no se volverán a repetir. No hablo de complot, pero cuando ciertas cosas se repiten vienen las dudas", ha indicado Ancelotti.
Por su parte, Adriano Galliani, administrador delegado y vicepresidente vicario del Milán, que siempre suele hablar tras los partidos, esta vez no ha querido realizar declaraciones evidenciando un gran enfado. "Estoy callado, también para no empeorar las cosas", se ha limitado a comentar un visiblemente enfurecido Galliani, mientras abandonaba el estadio de Bérgamo.