L D (EFE) Las última vez que Alonso comenzó primero una carrera fue en el Gran Premio de China del año pasado, hace más de seis meses, ya con el título en el bolsillo. Fue el 16 de octubre de 2005. Mas de seis meses después, el asturiano vuelve a liderar una parrilla. Este año el asturiano comenzó cuarto en Bahrein, octavo en Malasia, tercero en Australia y quinto en San Marino. Este sábado tenía como claro objetivo lograr la pole para evitarse problemas en la arrancada y costosas remontadas, y para ello es más que probable que su equipo haya tenido que modificar su habitual estrategia de cargar más combustible que la competencia.
Alonso ha brillado especialmente en la crono, en la que ha marcado no sólo el mejor tiempo del fin de semana (1:29.819). También lo ha hecho con un mejor registro que el que hace un año condujo a la pole al alemán Nick Heidfeld (1:30.081), entonces con un Williams-BMW. Los nuevos motores V8, que sustituyen a los V10 usados hasta el año pasado, se han mostrado mucho más veloces, ya que la merma de caballos permite franquear las curvas a mayor velocidad. El objetivo de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) de limitar la velocidad de los bólidos está cada más en evidencia.
Con mayor o menor velocidad, un nuevo duelo entre Alonso y Schumacher, primero y segundo en el campeonato, está servido. Hace dos semanas fue el alemán, cuatro veces ganador en Nürburgring, el que se impuso en Ímola por delante del español, pero éste tiene más claro que nunca que en la carrera del domingo puede alzarse con su tercer triunfo de la temporada para afianzarse aun más al frente del Mundial de pilotos.
En la segunda línea estarán dos brasileños, Felipe Massa (Ferrari) y Rubens Barrichello (Honda), mientras que a continuación arrancarán el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes) y el británico Jenson Button (Honda). El colombiano Juan Pablo Montoya (McLaren-Mercedes) compartirá la quinta fila con el alemán Ralf Schumacher (Toyota). Justo por delante de estos dos comenzarán el italiano Jarno Trulli (Toyota) y el canadiense Jacques Villeneuve (BMW Sauber).
Por segundo gran premio consecutivo -también lo experimentó en Ímola-, el italiano Giancarlo Fischella, compañero de equipo de Fernando Alonso, quedó apartado de la lucha por las primeras filas de la formación de salida al ser decimotercero en la segunda parte de la clasificatoria. El italiano, que saldrá undécimo, culpó de su eliminación a Villeneuve, ya que considera que el campeón mundial en 1997 le impidió rodar más rápido en la pista. Nada más bajarse de su monoplaza fue raudo al box de BMW Sauber para quejarse airada, pero inútilmente. Lo cierto es que el romano no sabe exprimir el R26 como lo hace Alonso.
Los dos pilotos de la escudería Williams-Cosworth, el australiano Mark Webber y el alemán Nico Rosberg, perdieron dos posiciones en la formación de salida del Gran Premio de Europa, ya que el equipo ha decidido sustituir el motor de ambos monoplazas. Los ingenieros hallaron un problema en el propulsor del coche de primero tras la tercera y última sesión de pruebas libres para la quinta carrera del Mundial de Fórmula Uno. Debido a que sospechan que el motor del coche del australiano tiene todos los visos de no aguantar toda la carrera, han decidido sustituirlo antes de la clasificatoria. El coche de Rosberg también tendrá un motor nuevo ya que Williams-Cosworth no quiere el alemán que sufra el mismo problema.