L D (EFE) Alemania y argentina prometen un duelo intenso en el que no cabe otra aspiración que la victoria. Adrenalina pura, alto voltaje, compromiso con sus brillantes antecedentes. Todos los ingredientes de un partido que hará historia estarán concentrados en 90 minutos de juego, en 120 o en los penaltis, con protagonistas que sueñan con un pedazo de la gloria en cuyo umbral quedará el ganador. Los argentinos apuntan a repetir el mejor funcionamiento del equipo en este Mundial, como la primera parte contra Costa de Marfil, la jornada de la clamorosa goleada ante Serbia y Montenegro y los últimos 30 minutos frente a los mexicanos en los octavos.
"Hemos trabajado para reducir al máximo la cuota de azar", es la frase preferida del seleccionador albiceleste, José Pekerman, quien afirma que "no se puede dejar de ser optimista con este equipo y estos jugadores". El equipo argentino que saldrá al campo tiene la misma base que logró tres victorias e igualó un partido con Holanda en las dos primeras rondas, con dos posibilidades de cambios, Burdisso por Scaloni en la defensa y Lucho González por Cambiasso en la línea de medios.
Todo indica que Saviola y Crespo serán los puntas y que los veloces y escurridizos Tevez y Messi esperarán el momento de salir al ruedo cuando el rival comience a sentir el rigor físico del encontronazo, posiblemente vibrante por las características ofensivas de ambas selecciones. Argentina "tiene con qué ganar este partido, y si el equipo está bien, no caben dudas de que pasará a las semifinales", afirma Maxi Rodríguez, el autor del golazo con el que la formación de Pekerman superó su primer choque a todo o nada, contra México.
El mismo optimismo que tienen los sudamericano desborda el ánimo de los germanos, lo cual se advierte tanto en las declaraciones como en la actitud de los jugadores que han asumido por completo el objetivo impuesto por el seleccionador Jürgen Klinsmann de obtener el título mundial. El delantero Miroslav Klose se ha referido incluso a la "mala suerte" que han tenido los argentinos de tenerse que enfrentar en cuartos a Alemania. En el campamento alemán, nadie habla de la eventualidad de una derrota y la llamada serie negra -de seis años sin ganar frente a un grande- es prácticamente ignorada. "¿Cuál serie negra?", fue lo único que dijo el segundo entrenador Joachim Loew cuando se le preguntó sobre el asunto.
Klinsmann, como acostumbra, ha preparado el partido a partir de un análisis minucioso del rival y del que ha sacado algunas conclusiones tácticas que piensa aplicar mañana en el campo. Además, Alemania confía en su enorme forma física lo que, según el centrocampista Torsten Frings, le permite correr "90 o 120 minutos si es necesario, lo que incomoda mucho a los argentinos". Es de esperar que Alemania trate de marcar a los argentinos a presión desde tres cuartos de cancha ya que Joachim Loew ha dicho que al rival hay que "enervarlo" desde su propia mitad. En lo personal, no se esperan sorpresas puesto que Klinsmann tiene una formación titular clara que no ha dado indicios de querer variar.
"Hemos trabajado para reducir al máximo la cuota de azar", es la frase preferida del seleccionador albiceleste, José Pekerman, quien afirma que "no se puede dejar de ser optimista con este equipo y estos jugadores". El equipo argentino que saldrá al campo tiene la misma base que logró tres victorias e igualó un partido con Holanda en las dos primeras rondas, con dos posibilidades de cambios, Burdisso por Scaloni en la defensa y Lucho González por Cambiasso en la línea de medios.
Todo indica que Saviola y Crespo serán los puntas y que los veloces y escurridizos Tevez y Messi esperarán el momento de salir al ruedo cuando el rival comience a sentir el rigor físico del encontronazo, posiblemente vibrante por las características ofensivas de ambas selecciones. Argentina "tiene con qué ganar este partido, y si el equipo está bien, no caben dudas de que pasará a las semifinales", afirma Maxi Rodríguez, el autor del golazo con el que la formación de Pekerman superó su primer choque a todo o nada, contra México.
El mismo optimismo que tienen los sudamericano desborda el ánimo de los germanos, lo cual se advierte tanto en las declaraciones como en la actitud de los jugadores que han asumido por completo el objetivo impuesto por el seleccionador Jürgen Klinsmann de obtener el título mundial. El delantero Miroslav Klose se ha referido incluso a la "mala suerte" que han tenido los argentinos de tenerse que enfrentar en cuartos a Alemania. En el campamento alemán, nadie habla de la eventualidad de una derrota y la llamada serie negra -de seis años sin ganar frente a un grande- es prácticamente ignorada. "¿Cuál serie negra?", fue lo único que dijo el segundo entrenador Joachim Loew cuando se le preguntó sobre el asunto.
Klinsmann, como acostumbra, ha preparado el partido a partir de un análisis minucioso del rival y del que ha sacado algunas conclusiones tácticas que piensa aplicar mañana en el campo. Además, Alemania confía en su enorme forma física lo que, según el centrocampista Torsten Frings, le permite correr "90 o 120 minutos si es necesario, lo que incomoda mucho a los argentinos". Es de esperar que Alemania trate de marcar a los argentinos a presión desde tres cuartos de cancha ya que Joachim Loew ha dicho que al rival hay que "enervarlo" desde su propia mitad. En lo personal, no se esperan sorpresas puesto que Klinsmann tiene una formación titular clara que no ha dado indicios de querer variar.
Alineaciones probables
Alemania: Lehmann; Friedrich, Mertesacker, Metzelder, Lahm; Frings, Schneider, Schweinsteiger, Ballack; Klose y Podolski
Argentina: Abbondanzieri; Burdisso, Ayala, Heinze, Sorín; Maxi Rodríguez, Mascherano, Lucho González; Riquelme; Saviola y Crespo
Árbitro: Lubos Michel (Eslovaquia)
Estadio: Olímpico de Berlín. 17.00 horas
Alemania: Lehmann; Friedrich, Mertesacker, Metzelder, Lahm; Frings, Schneider, Schweinsteiger, Ballack; Klose y Podolski
Argentina: Abbondanzieri; Burdisso, Ayala, Heinze, Sorín; Maxi Rodríguez, Mascherano, Lucho González; Riquelme; Saviola y Crespo
Árbitro: Lubos Michel (Eslovaquia)
Estadio: Olímpico de Berlín. 17.00 horas