L D (EFE) Valverde, de 24 años, considerado ya como la joya de la corona del ciclismo español, ha ganado sobrado en una clara demostración de fuerza que le coloca como aspirante número uno en la Vuelta. Su forma de ganar, arrancando en medio de un inmenso charco a falta de 100 metros de meta y con espacio suficiente para celebrar el éxito brazos en alto por delante de Ogrady, Menchov y Freire, ha sido propia de un campeón.
El director del Comunidad Valenciana-Kelme, Vicente Belda, le comentaba antes de la etapa a su líder que el repecho situado a un kilómetro de meta le venía de maravilla y que debía intentarlo. Y Valverde se colocó en condiciones con los grandes de las llegadas masivas para apuntarse el triunfo en jornada en principio designada "para dejarla pasar". Los grandes se situaron delante por aquello de la lluvia torrencial y el peligro de caída. Entre ellos se alzó el ciclista murciano, que entró con un tiempo de tres horas, 43 minutos y 17 segundos, a una media de 42,215 kilómetros por hora.
El director del Comunidad Valenciana-Kelme, Vicente Belda, le comentaba antes de la etapa a su líder que el repecho situado a un kilómetro de meta le venía de maravilla y que debía intentarlo. Y Valverde se colocó en condiciones con los grandes de las llegadas masivas para apuntarse el triunfo en jornada en principio designada "para dejarla pasar". Los grandes se situaron delante por aquello de la lluvia torrencial y el peligro de caída. Entre ellos se alzó el ciclista murciano, que entró con un tiempo de tres horas, 43 minutos y 17 segundos, a una media de 42,215 kilómetros por hora.
Es la forma de presentarse en sociedad de Valverde, subcampeón del mundo, quien además ha sumado 20 ricos segundos de bonificación, lo que le sitúan décimo en la general a 45 segundos de Benoit Joachim y a sólo siete del primer rival directo, el kazako Alexander Vinokurov. Valverde suma su tercera victoria en la Vuelta -el año pasado ganó en Envalira y La Pandera-, esta vez al esprint. En su palmarés ya constan 28 victorias, quince de ellas esta temporada, donde incluye las Vueltas a Valencia, Murcia y Burgos.
La general ha ofrecido el turno del jersey oro de Benoit Joachim, agraciado en la escapada buena del día con unos cuantos segundos de bonificación que le bastaron para desbancar a su compañero Max Van Heeswijk. Decepcionado porque Armstrong no le llevó al Tour, al menos pudo aliviar su pena tras rematar una táctica preconcebida del equipo de Johan Bruyneel, que sigue manteniendo a seis hombres al frente de la general. Joachim se escapó en el kilómetro 43 junto al francés Flickinger (Ag2R), el belga Hulsmans (Quick Step) y el holandés Vanenberg (Rabobank). Los cuatro acumularon diez minutos de ventaja en el kilómetro 108. A partir de ahí, y con el susto en el cuerpo, los directores despertaron a sus respectivos corredores para echar abajo la fuga.
La ventaja cayó en picado, como la lluvia en Soria. El Saeco, el Cofidis, el T.Mobile y el Cpmunidad Valenciana-Kelme se fueron a la caza de los fugados. Y fue en el kilómetro 150 cuando pusieron fin al sueño de los aventureros. Entonces llegaron las clásicas tácticas de las formaciones de los esprinters, con los favoritos atentos a no quedar cortados y a las caídas. Zabel pinchaba su rueda trasera y quedaba descartado. Al final, como pez en el agua, Valverde dio una lección de las suyas, precisamente en una tierra de campeones, cuna de dos atletas míticos como Fermín Cacho, campeón olímpico de los 1.500 metros y Abel Antón, con dos títulos universales de maratón en su historial. Algo le debió de inspirar al ciclista del futuro.
Este martes se disputará la cuarta etapa, que unirá las ciudades de Soria y Zaragoza con un recorrido de 167,5 kilómetros. Así pues, una jornada que invita a la velocidad y a una llegada masiva. Las estadísticas recuerdan que la etapa más rápida de la Vuelta terminó en Zaragoza en 2001 y que Igor González de Galdeano estableció una velocidad media de 55,176 kilómetros por hora.
La ventaja cayó en picado, como la lluvia en Soria. El Saeco, el Cofidis, el T.Mobile y el Cpmunidad Valenciana-Kelme se fueron a la caza de los fugados. Y fue en el kilómetro 150 cuando pusieron fin al sueño de los aventureros. Entonces llegaron las clásicas tácticas de las formaciones de los esprinters, con los favoritos atentos a no quedar cortados y a las caídas. Zabel pinchaba su rueda trasera y quedaba descartado. Al final, como pez en el agua, Valverde dio una lección de las suyas, precisamente en una tierra de campeones, cuna de dos atletas míticos como Fermín Cacho, campeón olímpico de los 1.500 metros y Abel Antón, con dos títulos universales de maratón en su historial. Algo le debió de inspirar al ciclista del futuro.
Este martes se disputará la cuarta etapa, que unirá las ciudades de Soria y Zaragoza con un recorrido de 167,5 kilómetros. Así pues, una jornada que invita a la velocidad y a una llegada masiva. Las estadísticas recuerdan que la etapa más rápida de la Vuelta terminó en Zaragoza en 2001 y que Igor González de Galdeano estableció una velocidad media de 55,176 kilómetros por hora.