Después de la medalla de plata conseguida por Javier Gómez Noya en el triatlón, Hyde Park, el parque más famoso de Londres, puede dar hoy otra alegría al deporte español con la prueba de 10 kilómetros en aguas abiertas, en la que participará Erika Villaécija.
La barcelonesa, la única nadadora que compite en los Juegos Olímpicos de Londres tanto en la piscina como en aguas abiertas, quiera dar otra alegría al deporte español en el lago The Serpentine. Villaécija ya había sido olímpica en los Juegos de Atenas 2004, donde fue quinta en la final de los 800 libre, y en Pekín 2008, pero nunca había competido en una prueba en aguas abiertas, por lo que será su estreno después de haber nadado la semana pasada en los 800 metros libres, donde se quedó en las series.
Viniendo de la piscina, Erika cuenta con la ventaja de su velocidad final y tiene en su contra que es relativamente nueva en esta especialidad en la que comenzó a nadar el año pasado y consiguió su plaza olímpica en los Mundiales de Shanghái con el décimo puesto. Por lo tanto, debe llegar con fuerza a los últimos metros entre las mejores para hacer valer su esprint y evitar los golpes en los giros de las boyas.
El representante español en Hyde Park en la prueba masculina será Kiko Hervás, el viernes en la misma distancia. Hervás se verá perjudicado por la temperatura del agua, entre 19 y 21 grados, y, sobre todo, por la fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo que ha sufrido esta semana como consecuencia de una torcedura en el tobillo.