El robo a la selección de waterpolo se consuma en los despachos
La decisión del árbitro esloveno Boris Margeta de no dar por válido el gol de Iván Pérez condenó a España a la derrota ante Croacia.
El recurso presentado por la delegación española, tras el tanto no concedido a Iván Pérez en la última acción del partido de waterpolo contra Croacia (8-7), ha sido desestimado por el Comité de Apelación de la Federación Internacional de Natación (FINA), según informa la Federación Española.
"En espera de la redacción del fallo, la Federación Española está en condiciones de informar que el Comité de Apelación de la FINA, reunido esta tarde (martes) de urgencia en Londres tras el partido entre Croacia-España con "gol fantasma" que ha motivado la protesta oficial de la Delegación española, ha desestimado el recurso interpuesto", indica un comunicado federativo.
"La Real Federación Española de Natación no va a tomar ninguna decisión por el momento hasta la lectura del fallo", añade la nota.
El partido terminó con victoria de Croacia por 8-7. A cuatro segundos del final, Iván Pérez remató de espaldas a portería y el balón entró completamente, como se pudo ver en los dos videomarcadores instalados en el pabellón. El juez de línea así lo determinó, aunque el árbitro esloveno Boris Margeta"No recuerdo algo tan claro"
Después del partido, el seleccionador nacional de waterpolo, Rafa Aguilar, decía que "nunca" había visto "algo tan claro" y confiaba en que prosperase el recurso presentado por la delegación española, aunque finalmente no ha sido así. "El partido no ha acabado aquí", declaraba.
El técnico afirma que Iván Pérez le había asegurado que era gol: "No tenía necesidad de engañar, no tiene acné", ironizaba sobre el jugador de origen cubano, que con 41 años es el más veterano del waterpolo masculino en estos Juegos Olímpicos de Londres. Además, subrayó que no conoce precedentes de esta magnitud: "Es que no recuerdo algo tan claro nunca, es que en otros casos consultan".
"En nuestro deporte hay dos árbitros principales y luego hay dos linieres, que están invitados a los Juegos Olímpicos exclusivamente para mirar la línea de gol. Hacen esto y tiran pelotas. Entonces, si hay una duda, parece como muy razonable que el árbitro se tome un tiempo para una jugada de este estilo, porque no es para un córner, es para un gol y a final de tiempo, que le consulte", añadía.
Pero el eslovaco Boris Margeta "no quiso" hacerlo, como denuncia Rafa Aguilar:."Él me dijo que lo había visto, pero que no podía tomar la decisión de dar gol", concluyó con una frustración compartida por sus jugadores, especialmente Iván Pérez, quien ironizó con que si no se pueden emplear las nuevas tecnologías para determinar qué ha ocurrido, "pues qué bien está este deporte".
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