Toda España, de Madrid a Barcelona, se echó a la calle

Decenas de miles de madrileños se echaron a la calle para festejar la segunda Eurocopa consecutiva ganada por la selección española. En cualquier punto de la ciudad se podían escuchar las bocinas de los coches, petardos y vítores al campeón continental. Las principales arterias de la capital española como el Paseo de la Castellana, las plazas de Cibeles y Neptuno o la Puerta de Alcalá y del Sol se vieron paulatinamente abarrotadas de aficionados que mostraban su júbilo por el nuevo éxito de la selección, en contraste con el casi total silencio que reinó en Madrid durante el partido, con la excepción de los gritos por los cuatro goles marcados a Italia (4-0) por David Silva, Jordi Alba, Fernando Torres y Juan Mata.

En Barcelona, la victoria fue celebrada por unas 5.000 personas en la plaza de España. La novedad estuvo en la Rambla de Canaletas, lugar de celebración habitual de los aficionados del Barcelona, que anoche escenario de celebraciones por el triunfo de España en la Eurocopa. Según informa EFE, se desarrollaron en un ambiente festivo y no se registraron incidentes. Los habituales gritos de "Campeones, Campeones", "¡Que viva España!" y algún recuerdo no muy agradable para el delantero italiano Mario Balotelli fue lo más escuchado durante los festejos.

Miles de personas abarrotaron el centro de León, en concreto la Plaza de Santo Domingo y las calles adyacentes, para celebrar el triunfo. El centro habitual de todas las celebraciones deportivas en León estuvo, si cabe, más congestionado de aficionados que otras veces, pues ya antes de la conclusión el encuentro se fueron dando cita en la plaza y empezando el baño en la fuente que, al contrario que en la semifinal ante Portugal, no contó con un cordón policial a su alrededor para evitar la celebración bañada con agua. Los cánticos y el colorido inundaron las principales arterias de la capital leonesa en una celebración como pocas y que incluso superó las anteriores de la Eurocopa de 2008 y el Mundial de 2010.

La Plaza de España, lugar de celebraciones en la capital burgalesa, se vio desbordada por la alegría de los seguidores de la selección. En plena resaca festiva, ya que el domingo terminaban las fiestas mayores de Burgos, la selección española ha puesto el broche de oro a una semana de fiestas. Las camisetas rojas han teñido de color una plaza en la que sólo se oía el grito de "campeones, campeones".

En Jaén, el triunfo fue celebrado por unos 5.000 aficionados por las calles de la ciudad, aunque el principal foco del éxito fue la fuente del Bulevar, donde los ciudadanos la invadieron con camisetas rojas, celestes y del portero Iker Casillas. Con anterioridad, los ciudadanos de la capital cantaron los goles de Silva, Jordi Alba, Torres y Mata en cafés, restaurantes y en casas particulares, aunque fue con el pitido del árbitro Pedro Proença cuando se desató la locura en las calles. En todas las localidades de la provincia también se festejó el título en pantallas gigantes en la plaza de toros de Úbeda, en la plaza de la Guardia y en discotecas y salas de fiestas de Úbeda y Andújar, localidades estas últimas de 40.000 habitantes.

Alrededor de unas diez mil personas celebraron el triunfo final de España por el centro de Valladolid, sobre todo en el entorno de la Acera Recoletos y la Plaza de Zorrilla de la capital vallisoletana. Son entre diez mil y quince mil las personas que vieron el partido en la pantalla gigante colocada al final de la Acera Recoletos, en la Plaza Colón.