El Real Madrid ha puesto fin a las celebraciones por el trigésimo segundo título de Liga de su historia. Después del baño de multitudes que se dieron los blancos el pasado 3 de mayo en la plaza de Cibeles ante su afición, horas después de cantar el alirón en San Mamés, y de la fiesta vivida el domingo por la noche en el estadio Santiago Bernabéu tras la goleada al Mallorca en la última jornada del campeonato (4-1), este lunes se han cerrado las celebraciones con los actos institucionales en la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento y la Catedral de La Almudena.
La primera parada ha sido la sede de la Comunidad, la Real Casa de Correos en la Puerta del Sol. Allí era recibida la expedición madridista por la presidenta regional, Esperanza Aguirre, minutos después de las diez de la mañana. Normalmente la primera visita era siempre a la Casa Consistorial, pero el itinerario se ha visto modificado en esta ocasión por la convocatoria, apenas dos horas después, de una concentración de los indignados en Sol.
Aguirre: "Habéis sabido responder con brillantez"
Durante su discurso, Aguirre ha pedido al club blanco que la próxima temporada logre más victorias y títulos para visitar otra vez la Real Casa de Correos. No botó esta vez la presidenta, como había hecho la semana pasada en las celebraciones del Atlético de Madrid por el título de la Liga Europa conseguido en Bucarest. "Habéis sabido responder a la exigencia y lo habéis hecho con enorme brillantez. Lo único que quiero es felicitaros. Al presidente, Florentino Pérez, a todos los directivos y a los trabajadores del club. Al equipo técnico, capitaneado por un líder del fútbol mundial, José Mourinho, y más todavía a los jugadores, que sois los que a base de talento habéis ganado domingo a domingo esta Liga", le decía Esperanza Aguirre a los campeones.
"Y en agosto vais a venir con la Supercopa de España. Porque la vais a ganar. La temporada que viene más victorias, más títulos y más visitas a la Puerta del Sol, donde os esperamos y tenéis siempre vuestra casa. Felicidades por la Liga, por vuestro buen juego y por los golazos. Nos han hecho disfrutar a todos los madrileños, españoles y aficionados del mundo entero", agregaba la presidenta, que recibió una placa conmemorativa de Florentino Pérez.
"Habéis hecho una temporada extraordinaria. Habéis marcado 121 goles, habéis pulverizado el récord de la historia, habéis llegado a los 100 puntos y así habéis conseguido el mayor número de puntos jamás visto. Con esta Liga habéis escrito una página más en la gloriosa historia del Real Madrid", concluía Aguirre para recibir a continuación una réplica del trofeo de manos de Florentino.
Florentino felicita al Atlético y al Rayo
Precisamente, el presidente aseguraba en su turno de palabra que "el Madrid no cesa en el empeño de alcanzar retos que parecen imposibles". "Los números conseguidos serán imposibles de olvidar. Han hecho honor a nuestro escudo y a nuestra historia", afirmaba Florentino para recordar que "este nuevo título de Liga llega con los valores que hemos heredado de generación en generación" y prometer que "volveremos con nuevos títulos y nuevos triunfos" porque "contamos con la fuerza de nuestros seguidores".
"El Real Madrid seguirá siendo bandera de esta tierra por todo el mundo", ha dicho el máximo dirigente madridista, quien también ha querido felicitar al Atlético de Madrid por su título de la Liga Europa, "que es sin duda un triunfo del fútbol madrileño", y al Rayo Vallecano por haber conseguido la permanencia.
También el capitán Iker Casillas había tomado la palabra y de manera escueta compartía su alegría junto a los presentes en el patio de la Real Casa de Correos. "Esto es para todos los madrileños, esperamos volver a vernos más veces aquí", manifestaba. Después, hubo un pequeño baño de masas de la plantilla desde el balcón. Ante cerca de 500 personas, el portero blanco agradeció a los aficionados su presencia en la Puerta del Sol para celebrar el título: "¡Esta copa es vuestra, de los madridistas, de los madrileños! ¡Muchas gracias!", gritaba.
Sergio Ramos, Xabi Alonso e Higuaín también se animaron a coger el micrófono. El primero bromeó diciendo que tenía la Copa "bien sujeta", por si había dudas después de que el año pasado se le cayera desde el autobús la Copa del Rey. El segundo recordó que no es la primera ni la "última vez" que visitan o visitarán la sede madrileña y el argentino, entre gritos de "Pipa quédate", agradeció a todos el haber compartido momentos "tan bonitos", aunque como hizo el domingo por la noche en el Bernabéu, no quiso desvelar su futuro.
Botella: "No merecéis un diez, sino un 100"
Después de esta primera parada en la Real Casa de Correos, la expedición madridista se desplazaba al Ayuntamiento, donde era recibida por la alcaldesa Ana Botella. Allí, la primera edil destacaba que la Liga ganada por el equipo blanco es "el triunfo del fútbol español y especialmente el madrileño".
"Gracias a vuestro esfuerzo celebramos la trigésima segunda Liga", le ha dicho Botella a los campeones para centrar sus elogios en las figuras de Iker Casillas y Cristiano Ronaldo, máximo goleador del equipo en el torneo con 46 tantos. "Gracias Iker, capitán del equipo y de la selección que representará a España en la Eurocopa (...) gracias a Cristiano por tus goles y gracias a todo el equipo. Sois un equipo sobresaliente. No un equipo que merezca un diez, sino un 100, que son los puntos que habéis logrado en la Liga", ha dicho la alcaldesa de Madrid, que al igual que Aguirre también se puso la camiseta madridista y confió en que "el año que viene vengáis con la Décima".
El lapsus de la alcaldesa
La anécdota vino cuando la regidora de la capital confundió el clásico del pasado 21 de abril en el Camp Nou, donde el Madrid ganó al Barcelona por 1-2 para asestar un golpe definitivo a la Liga, con el de hace cinco meses en diciembre, cuando los blancos perdieron por 1-3. "¿El mejor partido de la temporada? Sin duda el clásico del Bernabéu", dijo sin titubeos Ana Botella, provocando más de una risa entre los presentes.
Después de los discursos, los jugadores y miembros del cuerpo técnico y la directiva del Real Madrid subían a un escenario junto a Botella para hacerse la foto de familia mientras sonaban los acordes del We are the Champions de Queen.
La Almudena, última parada
La jornada de celebraciones se cerraba con la ofrenda floral a la Virgen de la Almudena en la Catedral. Con el sonido de las campanas de fondo, y acompañados de una multitud de aficionados congregados en las cercanías del templo, la expedición entró puntual en el templo, donde fue recibida por el cardenal Antonio María Rouco Varela.
Dentro se ofició una ceremonia corta, en la que Florentino fue el primero en tomar la palabra para dar sobriedad al acto más serio de la jornada. "El Madrid cumple una vez más esta tradición. Es un título que traemos a la catedral. El esfuerzo ha sido enorme, pero lo hemos logrado con récord de puntos y goles. Hemos tenido fe y nunca nos hemos rendido", destacaba. "Vivimos momentos de dificultad con la crisis. El fútbol es un instrumento para celebrar e impulsar la solidaridad. Estamos convencidos de que devolvemos a la sociedad lo que nos da. Trabajamos para compartir nuestros éxitos. Por eso, ofrecemos este título a la Almudena", añadió el presidente madridista.
Después, tomó la palabra Rouco Varela para agradecer la visita del campeón. "Es un goce ofrecer el título a la patrona. El fútbol es un deporte que pertenece al ser del hombre, que necesita cultura, crear belleza y que necesita jugar. Un fútbol de valentía, de esfuerzos. El Madrid da un paso importante al ofrecerle la Copa a la virgen. Es un augurio de éxitos", afirmó.
Acto seguido, toda la plantilla acompañó a los cuatro capitanes del equipo –Casillas, Ramos, Marcelo Vieira e Higuaín– al altar desde donde la Virgen de la Almudena, en lo alto, preside uno de los puntos de la catedral. Allí recibió la visita de los cuatro, que portaban el ramo de flores y la copa de la Liga.
También el resto de jugadores subió a presentar sus respetos a la patrona de Madrid con las excepciones de Lass Diarra, Nuri Sahin, Mesut Özil, Hamit Altintop, Sami Khedira, Zinedine Zidane y Karim Benzema, que no lo hicieron por su condición de musulmanes. Después, todos juntos, se hicieron la foto oficial. Ahí acabó un acto que, entre carreras de aficionados que pedían autógrafos de camino al autobús fue muriendo con el mismo sonido de las campanas con el que se inició.