Diego Simeone ha comparecido en rueda de prensa junto a Adrián y Falcao antes de la final de la Liga Europa con gesto serio, preocupado, antes de un partido que puede marcar su carrera como entrenador.
"Una final es especial. Uno se prepara toda una vida para jugarla y a veces hay posibilidad de jugar dos, tres o muchas más. Hay que vivirla con la ilusión y el hambre de un chico que empieza y que piensa que va a ser su primera final, y de un jugador con experiencia que ha vivido diferentes momentos", ha valorado Simeone, que ha llevado al Atlético a una final cinco meses después de su llegada.
El técnico ha quitado importancia a la experiencia de haber jugado finales: "No te asegura nada, la experiencia es importante, pero mucho más importante el entusiasmo, la ilusión y la fortaleza anímica que tengas cuando te toque mañana entrar al terreno de juego", ha añadido el entrenador, que también fue preguntado por la influencia que pueda tener el cansancio en su plantilla en la final de este miércoles. "Hay una final de por medio, no hay cansancio, sólo ilusión y un montón de gente en Madrid que nos está esperando", ha destacado.
Simeone también ha elogiado el esfuerzo de sus futbolistas en esta campaña: "Desde que hemos llegado nos hemos encontrado con una plantilla entregada a trabajar. El esfuerzo de ellos les ha permitido encontrarse en esta semana muy importante para el Atlético de Madrid y con muchas expectativas, sabiendo que nadie te regala nada".
Además, Simeone ha augurado un "partido emocionante e intenso", al tiempo que ha afirmado que el juego de su rival "es mucho más vertical que de posesión" y el de su equipo "es mucho más equilibrado", porque "por momentos" puede tener posesión y "por momentos jugar a los espacios", informa EFE.
El entrenador, que ha insistido en su "admiración" por su compatriota Marcelo Bielsa, entrenador del conjunto bilbaíno, y que ha destacado que el Athletic "va a ser valiente y un equipo que aprovechará toda su frescura de mitad de cancha hacia adelante", vive su primera final como técnico, pero ya ha jugado varias como futbolista.
"Como entrenador es raro. Mejor ser jugador, seguro, porque del lado del entrenador hay un montón de ideas y pensamientos que se cruzan y es un partido que ya jugamos cuatro veces. Desde el lado del jugador, lo más grande que te pueda pasar es jugar una final. El jugador sigue la inercia y lo que te responde el cuerpo. Necesitamos mañana un equipo con mucha personalidad y que sostenga lo que se juega el entorno, sin pensar en él", ha concluido.
Falcao: "Hay que tener la experiencia del veterano y el hambre del juvenil"
En la misma línea que su entrenador, la estrella del Atlético de Madrid ha enfatizado sobre la importancia se saber jugar una final, en la que hay que competir con "la experiencia de un veterano y el hambre de un juvenil".
Falcao tiene la "ansiedad normal por una final" en el día previo al choque y es "consciente" de que hará "historia" si gana dos Ligas Europa seguidas "con diferentes clubes", aunque ha avisado: "Sólo trato de enfocar en lo que el entrenador quiere, lo que el equipo necesita de mí y lo que queremos plasmar sobre el terreno de juego".
El ariete marcó el tanto del triunfo del Oporto en la final de 2011. "Un gol marca a un jugador en esta instancia. Yo lo viví el año pasado y es especial. Hoy en día no importa quien haga el gol. Lo que queremos es ganar, pero sí creo que ir por delante en el marcador te da una mayor tranquilidad y te permite manejar un poco más el partido", ha indicado en la rueda de prensa en Bucarest.