El español Rafael Nadal, segundo jugador mundial y primer cabeza de serie del torneo Godó, peleará por su séptimo título en Barcelona tras derrotar a su compatriota Fernando Verdasco (6-0 y 6-4) en una hora y 25 minutos de partido. Nadal se medirá al también español David Ferrer, en una final que ya se ha convertido en un clásico del torneo, pues ambos se enfrentaron en la última ronda de 2008, 2009 y 2011 y en todas ellas ganó el balear.
Como un ciclón entró el 'rey de la tierra' en la central del Real Club de Tenis Barcelona, para sumar seis juegos seguidos y endosarle un rosco a Verdasco, que había caído ante el manacorense en los doce enfrentamientos precedentes. Sólido con su saque, agresivo desde el fondo de la pista, intenso, concentrado, disparado hacia su séptima final en Barcelona, el número dos mundial ventiló la primera manga en 29 minutos de absoluto dominio.
Verdasco frenó la sangría en la reanudación, al ganar por fin su saque en el primer juego del segundo set. El madrileño incluso tuvo una bola de break para ponerse 2-0 que desperdició. De haber roto el servicio de Nadal, quizá habría tenido una mínima opción. Sin embargo, desperdició su oportunidad y perdió el suyo tres juegos después. A partir de ahí, Verdasco, más metido, menos errático y más efectivo con su saque luchó contracorriente para alargar lo máximo el partido.
Sin nada que perder, soltó su derecha y peleó cada punto, cada juego, y volvió a tener otras dos bolas de ruptura con el 5-4. Pero Nadal salvó las dos y acabó ganando su saque para ganar también el partido.
Ferrer sobrevive al saque de Raonic
El español David Ferrer, tercer cabeza de serie del Godó, disputará su cuarta final en Barcelona al derrotar al canadiense Milos Raonic, undécimo favorito, por 7-6 (2) y 7-6 (5), en dos horas y cinco minutos.
Ferrer sobrevivió al gigante Raonic, uno de los cañoneros del circuito, amarrándose a la pista, defendiendo con uñas y dientes su servicio y alargando las dos mangas hasta los desempates. Ambos tenistas fueron incapaces de romperse el saque durante todo el partido. Raonic ganaba su servicio con relativa facilidad y el español sufría algo más con el suyo, según informa Efe.
Hasta siete bolas de rotura dispuso el canadiense de origen montenegrino. Ferrer tuvo otras cuatro, pero ninguno de los dos pudo poner tierra de por medio. Así que el duelo se resolvió en sendos desempates. En el primero, el español se puso 6-0 arriba para cerrarlo, en un visto y no visto, por 7-2. En el segundo, la igualdad se mantuvo hasta el 3-3, pero Ferrer también jugó mejor los puntos decisivos y volvió a llevárselo por 7-5.