Emotiva rueda de prensa en la Ciudad Deportiva del FC Barcelona en San Juan Despí, donde el presidente del club, Sandro Rosell, empezaba confirmando la marcha de Pep Guardiola a final de temporada: "Pep Guardiola no continuará la próxima temporada". "Gracias Pep por lo que has aportado, por perfeccionar un modelo futbolístico que nunca más podrá ser cuestionado, por tu afecto, el apoyo y el cariño. Tu labor ha sido modélica. El agradecimiento será eterno para el mejor entrenador del mundo", añadía Rosell, que a continuación cedía el turno de palabra a Guardiola, el protagonista del día.
Al inicio de su alocución, el técnico de Sampedor quiso destacar que "ante todo lamento profundamente la incertidumbre que he generado sobre mi continuidad, pero me gustaría que entendiérais que no es una situación fácil para mí. Siempre he querido contratos cortos. Cuatro años en el Barcelona es una eternidad. Me he desgastado, me he vaciado y quiero rellenarme", ha dicho el técnico de Sampedor, visiblemente emocionado, dejando entrever la posibilidad de que la próxima campaña estará alejado de los banquillos.
El todavía entrenador barcelonista, que ha comparecido ante los medios de comunicación junto a Rosell, y el secretario técnico, Andoni Zubizarreta, dice que se va "con la sensación de haber estado aquí con mucho orgullo. Este es un club de una fuerza, una vida y de una potencia increíble. No tengáis miedo, el que me sucederá está más que capacitado para llevar a cabo mi trabajo", ha comentado Guardiola, minutos antes de que Rosell anunciara que "el próximo entrenador será Tito Vilanova". Rompía así el máximo dirigente azulgrana las quinielas que señalaban a Marcelo Bielsa, Ernesto Valverde o Laurent Blanc, entre otros técnicos, como el próximo inquilino del Camp Nou.
Lo tenía decidido hace meses
En la rueda de prensa, que comenzaba con cinco minutos de retraso sobre el horario previsto y ha contado también con la presencia de los cuatro capitanes del primer equipo del Barça (Puyol, Iniesta, Xavi y Valdés) y otros jugadores como Pedro, Busquets, Piqué o Cesc Fábregas -la ausencia más destacada fue la de Leo Messi-, el entrenador ofrecía más detalles sobre su adiós. "A finales de diciembre comuniqué que creía que final de mi etapa estaba cerca, pero tenía el problema de que no podía hacerlo públicamente. Ni siquiera pude decírselo a los jugadores porque tenía que seguir con las labores de entrenador. La decisión la había tomado hace mucho tiempo. Y ahora el club es el que puede decidir y tiene tiempo. No quería generar esta situación y probablemente fue una equivocación", reconocía.
"La estima que tengo a los jugadores es muy grande. Hemos vivido mucho juntos como para que por una cuestión de seguir se pudiera romper. Se lo he dicho y han entrenado como bestias, así que lo que viene también será bueno. Sé de dónde me voy, de un sitio privilegiado, pero creo que hago lo que toca. Más allá de los resultados, me voy orgulloso por el trabajo bien hecho", continuaba Guardiola, que ha dado las gracias a los jugadores "por haber tenido el privilegio de entrenarlos desde el primer hasta el último día".
Guardiola hacía también un repaso a su carrera como entrenador del Barcelona: "Me voy recuperado. Hace cinco años me ofrecieron filial y fue una alegría. Y un año después me dieron la oportunidad de subir y la sensación era igual, de que me comía el mundo. Creía que sería capaz de todo y quiero recuperar eso. Soy responsable del desaste. Podría haber seguido, pero no como merece un entrenador del Barça. Me voy con la sensacion de que los deberes están bien hechos", insistía el técnico de Sampedor, el mejor entrenador en la historia del club al haber conquistado trece de 18 títulos posibles, entre ellos dos Copas de Europa, dos Mundiales de Clubes, tres Ligas y una Copa del Rey, que pueden ser dos si el equipo derrota al Athletic de Bilbao en la final del próximo 25 de mayo en el estadio Vicente Calderón.
"El trofeo del orgullo"
Tras la intervención de Guardiola, de nuevo fue el turno de Rosell. Antes de dar la palabra a Andoni Zubizarreta, el presidente barcelonista volvía a dar las gracias al entrenador. "Sabremos administrar la herencia que nos deja, sobre todo el estilo de juego tan remarcable que todos recordadrán como el sistema de Pep. Más allá de los títulos me quedo con uno, el trofeo del orgullo, que es muy difícil de conseguir. Intentaremos administrar la herencia lo mejor que podamos".
Zubizarreta: "Primero miramos en casa"
Por su parte, Zubizarreta elogia la figura de Pep Guardiola, a quien define como "un referente futbolístico mundial" y asegura que "aún tiene que escribir muchas páginas". Y a continuación mostraba su convencimiento de que Tito Vilanova sabrá manejar el legado que deja Guardiola en el Barcelona. "Tito representa los valores del club, además de una implicación máxima. "Siempre hemos dicho que cuando buscamos jugadores, primero miramos en casa. ¿Y qué tenemos en casa? A Tito", destaca el secretario técnico de la entidad.
El futuro de Pep
La pregunta ahora, una vez confirmada su marcha del Barcelona, es inevitable: ¿qué hará ahora Guardiola? Josep Maria Orobitg, representante del técnico, tiene sobre la mesa muchas ofertas y una de las más tentadoras le ha llegado de la Federación Inglesa (FA), que quiere al preparador catalán como su seleccionador para afrontar la fase de clasificación para el Mundial de Brasil 2014. Además de la FA, varios clubes de la Premier League como el Chelsea, Manchester United, City y Liverpool también quieren contratar al técnico barcelonés.
Otros equipos que sueñan con hacerse con sus servicios son el Inter de Milán y el Milan de Silvio Berlusconi, aunque en la entidad rossonera tendría el problema de que se reencontraría con Zlatan Ibrahimovic después de los sonados enfrentamientos que han mantenido en la Ciudad Condal, donde ambos coincidieron en la temporada 2009/10. En las últimas semanas también ha cobrado fuerza la posibilidad de que el técnico catalán, seducido por los petrodólares, se convierta en el próximo seleccionador de Qatar o incluso entrenase al Al-Ahli de Doha, club en el que ya jugó y donde podría coincidir con Raúl González.
No obstante, después de las palabras del propio técnico asegurando que se ha "vaciado" y que necesita "rellenarse", lo más probable es que Guardiola se tome un año sabático. Dentro de unas semanas podríamos tener la solución. O tal vez no.