La situación más curiosa de toda la jornada de Liga se vivió el domingo por la noche en Vallecas. El protagonista fue el entrenador del Rayo, José Ramón Sandoval, un genio y figura allá por dónde va.
El entrenador trató de parar al Atlético de Madrid de una forma curiosa e ilegal. Era el minuto 88, su equipo iba perdiendo por 0-1 y Diego corrió para poner en juego el balón desde el saque de banda. Sandoval le pidió al recogepelotas que no le diera rápidamente el esférico al jugador brasileño, pero no le dio tiempo.
Cuando Diego tenía el balón en las manos e iba a sacar, Sandoval, al más puro estilo Ibaka, saltó para evitar un contraataque. El técnico se arrepintió rápidamente y Mateu Lahoz fue a llamarle la atención. Increíblemente, el árbitro decidió no expulsarle, aunque su acción mereciera la roja.
"Le he perdido perdón a él (Diego) y al árbitro. Sé que la jugada no estaba bien. Por instinto he intentado evitar el saque de banda con un tapón a lo Michael Jordan", dijo el técnico del Rayo.