Con Simeone tampoco. El Atlético ha vuelto a perder un derbi liguero en el Vicente Calderón ante el Real Madrid, y ya van cinco seguidos. Ven así los colchoneros cómo se alarga la maldición ante un rival que, con su triunfo por 1-4, aleja todos los fantasmas. Cristiano Ronaldo ha vuelto a ser el héroe de la noche para los blancos. El portugués ha marcado tres goles y suma 40 en el campeonato, uno más que Leo Messi. Ambos van camino de pulverizar todos los registros posibles. Pero ésa es otra lucha menor porque lo que realmente importa es la Liga.
De salida, Mourinho volvía a sorprender a propios y extraños con su once, en el que entraron Coentrao, Kaká y Di María, quien acaba de recuperarse de una larga lesión. En el Atlético, Simeone pudo contar finalmente con Falcao y Adrián, que habían sido duda hasta última hora por gripe.
Después de un inicio trepidante, con el partido de ida y vuelta, el Madrid pasó a controlar la pelota ante un oponente que aguardaba su oportunidad al contragolpe. Pero las primeras ocasiones fueron del Atlético, que lo intentó con un remate de Falcao ante el que se lució Casillas y con un disparo de Gabi que Coentrao desvió providencialmente a córner. Contra todo pronóstico, el exjugador del Benfica le ha ganado esta vez la partida a un Marcelo que ni siquiera se vistió de corto. La réplica del Madrid la puso Sergio Ramos con un cabezazo en boca de gol que Godín sacó casi bajo el larguero.
El derbi estaba cargado de tensión, como era de esperar, y casi lo único que faltaba era el gol. Acabó llegando a los 25 minutos y llevó la firma de Cristiano Ronaldo, quien útimamente vuelve a cogerle el gusto a marcar de libre directo. En una falta lejana, el portugués acabó colando la pelota junto al palo izquierdo de la portería de Courtois, quien pudo haber hecho más. Pero el portero belga se quedó haciendo la estatua y asistió impotente al 0-1.
No se descompuso el equipo de Simeone, que mantuvo el tipo aunque le faltó algo de fe para ir a por el empate. De hecho, los blancos pudieron haber ampliado su ventaja antes del intermedio, aunque Benzema perdonó en un cabezazo en boca de gol y Courtois metió una buena mano para desviar un disparo de Cristiano. Si llegaba el Madrid al área rival fue gracias en buena parte a las facilidades defensivas que dio un nerviosísimo Perea. Mientras, el árbitro Delgado Ferreiro empezaba a estar en el ojo del huracán al dejar de señalar un penalti de Godín a Pepe por un empujón claro dentro del área.
Cristiano disipa las dudas
Mourinho movió el banco tras el paso por vestuarios y dio entra a Özil por Kaká, quien no pudo brillar en ataque aunque se empleó a fondo en tareas defensivas. El Real Madrid parecía tener controlada la situación, pero en una jugada tonta, sin aparente peligro, acabó pagando cara su desidia. Como la que demostró Arbeloa ante Adrián al permitirle enviar un medido centro al corazón del área. El asturiano encontró a un Falcao que, sin oposición alguna, conectó un fenomenal testarazo para batir a Iker.
Viendo cómo la Liga se podía escapar con el empate que reflejaba el marcador, el Madrid se puso las pilas y metió una velocidad más al partido. Para esas tareas tiene a un jugador explosivo como es Ángel Di María, quien trató de buscarle las cosquillas a Filipe Luis. Fue el trío portugués del Madrid –Cristiano, Coentrao y Pepe– el que rozó el tanto que permitiera a los blancos volver a ponerse por delante, pero Courtois sacó a relucir sus guantes en más de una ocasión para evitarlo.
Lo que no pudo impedir el cancerbero belga fue el golazo de Ronaldo, alcanzado ya el ecuador de la segunda mitad. El portugués se presentó en el balcón del área y soltó un zapatazo increíble para colocar el balón por toda la escuadra. Esta vez nada pudo hacer Thibaut Courtois. De nuevo le tocaba a los suyos remar contra corriente en busca de la igualada. Bien movido por Diego, el Atlético reaccionó y merodeó el área de Casillas, gozando de un par de ocasiones para haber empatado, como un cabezazo de Falcao que salió fuera por poco y un remate desviado de Adrián. El Madrid sudaba para frenar las embestidas rojiblancas.
De lo que pudo ser el 2-2 se llegó al 1-3. Ya en la recta final del partido, Delgado Ferreiro no dudó en dirigirse al punto de penalti tras un posible derribo dentro del área de Godín a Higuaín, que había entrado en sustitución de un desafortunado Benzema. Cristiano superó con cierto suspense a Courtois en el lanzamiento de la pena máxima, muy rigurosa, para sellar su hat-trick (m.83). La sentencia definitiva llegó sólo cuatro minutos después, cuando Callejón, que acababa de ingresar en el campo por Di María, batió por bajo al meta local en el mano a mano. Diego, a punto de llegarse al final del tiempo reglamentario, pudo haber acortado distancias con un remate que se estrelló en el palo.
Al final, otro triunfo del Madrid en el Calderón tras un intenso derbi. Tres puntos más al zurrón de los blancos, que de nuevo se sitúan con cuatro de ventaja sobre un Barcelona que venía de golear al Getafe. Así, el clásico del próximo día 21 en el Camp Nou podría acabar resultando decisivo en el devenir del campeonato, aunque antes los blancos recibirán al Sporting de Javier Clemente, mientras que los culés visitarán el Ciudad de Valencia. Prohibido fallar antes de la primera gran final del fútbol español. Luego podría llegar otra en Europa, con permiso de Bayern y Chelsea, pero eso es otro cantar.
Ficha técnica
Atlético de Madrid, 1: Courtois; Juanfran, Perea, Godín, Filipe Luis; Gabi, Tiago; Diego, Arda Turan (Koke, m.77); Adrián y Falcao
Real Madrid, 4: Casillas; Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Coentrao; Khedira, Xabi Alonso; Di María (Callejón, m. 84), Kaká (Ozil, m. 46), Cristiano Ronaldo; y Benzema (Higuaín, m.71)
Goles: 0-1, m.25: Cristiano Ronaldo, de falta directa; 1-1, m.55: Falcao; 1-2, m.68: Cristiano; 1-3, m.83: Cristiano, de penalti; 1-4, m.87: Callejón
Árbitro: Delgado Ferreiro (Comité vasco). Mostró tarjeta amarilla a Arbeloa (m.34), Xabi Alonso (m.58) y Di María (m.77), del Real Madrid; y a Filipe Luis (m.61) y Koke (m.92), del Atlético
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima tercera jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 55.000 espectadores. Lleno. Antes del inicio del partido, el equipo de balonmano del Atlético de Madrid ofreció el título de la Copa del Rey