Iba a ser la noche de Raúl. El delantero del Schalke, leyenda viva del madridismo y del fútbol español, estaba llevando a cabo una actuación colosal y, con dos tantos –uno marca de la casa y otro sublime- comandaba a los suyos hacia la victoria demostrando de paso cuánto se equivocaban aquellos que pedían su retirada hace ya varios años.
Pero a este Athletic hay que rematarle para vencerle. Incluso cuando parece que está moribundo, es capaz de soltar zarpazos de donde no hay nada. Eso es lo que hizo en unos últimos 20 minutos de infarto en los que no sólo le dio la vuelta al marcador, sino que dejó la eliminatoria prácticamente sentenciada.
Raúl, enorme
A diferencia del partido de Old Trafford, al Athletic le costó mucho acomodarse al Veltins Arena. De hecho, salió más entonado el Schalke, espoleado por los suyos. Sin embargo, en una contra perfecta, Llorente adelantó al conjunto español. Lo hizo, eso sí, después de un error garrafal de Timo Hildebrand, guardameta que no dejó muy buen recuerdo en Valencia hace ya unos años.
Pero entonces emergió la figura de Raúl González. Otra vez. Sólo dos minutos después el siete logró la igualada. Uchida se internó por la banda derecha, soltó un balonazo al primer palo, y ahí apareció Raúl para meter la puntera y superar a Gorka. Su gol de toda la vida. El mismo que solía repetir hace ya 18 años en el Santiago Bernabéu.
Con ese resultado, y con la sensación de que el Schalke merecía más, se llegó al descanso. Pero tras el paso por vestuarios el Athletic salió mejor, en busca de un 1-2 que derrumbara a los alemanes. Tuvo que ser un español quien lo evitara. A los nueve minutos de la reanudación Raúl soltó un zurdazo maravilloso desde fuera del área ante el que nada pudo hacer Gorka.
Con este tanto, el siete lograba su gol número 75 de su carrera en competición europea. El máximo registro, aventajando ya en cinco a Inzaghi, segundo. Era la coronación a una noche magistral, para grabar en vídeo y mostrarla a más de un delantero de los de primer nivel que deambulan por nuestro fútbol.
El Athletic no se rinde
Pero el Athletic no estaba por la labor de homenajes. Bielsa le ha imprimido un gran carácter, como ya se demostrara en Manchester, y cuando peor pintaban las cosas lo sacó a relucir. Lo hizo primero con un testarazo de Llorente tras saque de esquina para poner la igualada.
El tanto sentó como un jarro de agua fría sobre los alemanes, que en menos de diez minutos vieron cómo De Marcos lograba el 2-3. Sí reaccionaron después, y por medio de Huntelaar y de nuevo Raúl pudieron lograr el empate a tres, que hubiera dejado viva la eliminatoria. Pero fue Muniain, ya en el tiempo de añadido y tras una magnífica jugada de Susaeta, quien logró el 2-4 definitivo.
Un resultado que deja las cosas muy de cara para el conjunto español que, como demostró ante el Manchester United, no va a permitir ninguna concesión en San Mamés. Sólo un supremo Raúl puede obrar el milagro. No sería el primero. Y visto lo visto esta noche, sigue manteniendo las condiciones para ello. Las mismas de toda la vida.
Ficha técnica
Schalke, 2: Hildebrand (Schober, m.46); Uchida, Papadopoulos, Matip, Fuchs; Hoger (Holtby, m.55), Jones; Farfán, Raúl, Draxler (Jurado, m.55); y Huntelaar
Athletic, 4: Gorka; Iraola, Javi Martínez, Amorebieta, Aurtenetxe (Iñigo Pérez, m.71); De Marcos, Iturralde, Ander Herrera (Gómez, m.46); Susaeta, Llorente y Muniain
Goles: 0-1: m.19: Llorente; 1-1, m.21: Raúl; 2-1, m.59: Raúl; 2-2, m.72: Llorente; 2-3, m.81: De Marcos; 2-4, m.93: Muniain
Árbitro: Pedro Proença (Portugal). Amonestó a Iturraspe y Amorebieta, del Athletic; y a Hoger, Uchida y Huntelaar, del Schalke
Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Liga Europa disputado en la Veltins Arena de Gelsenkirchen