El encuentro entre el Lugo y el Oviedo perteneciente al Grupo I de la Segunda División B a punto estuvo en acabar en tragedia.
Los aficionados asturianos estallaron en júbilo cuando su equipo se adelantó en el Ángel Carro. Óscar Martínez se acercó a la grada para celebrar el tanto con su afición, cuando la barandilla de seguridad cedió provocando una avalancha en la que se vieron afectadas unas 30 personas.
El encuentro tuvo que verse suspendido durante varios minutos, pero se pudo reanudar sin mayores problemas. Al final, sólo dos hinchas sufrieron heridas leves y el encuentro concluyó en empate a dos.