El águila que el Benfica tiene como mascota le ha jugado una mala pasada a su presidente. Cuando Luis Felipe Vieira subía al atril para dar un discurso en un acto institucional, el águila Victoria batió sus alas impactando con el cuerpo del mandatario.
Vieira, sorprendido ante la actitud de su mascota, se vuelve con cara de incredulidad, pero continúa impasible hacia el atril. Fue tan solo un susto porque el águila continuó en su sitio comportándose de maravilla.
Victoria es todo un símbolo en el Benfica. De hecho, antes de cada partido, el águila ofrece un espectáculo de cetrería junto a sus cuidadores que hacen las delicias de los aficionados que acuden al Estadio de la Luz.