Rafael Nadal, que con sus dos puntos logrados, ante los argentinos Juan Mónaco y Juan Martín del Potro, ha sido el artífice de la quinta victoria de España en la Copa Davis, ha destacado que siente "emoción y felicidad" por lo conseguido".
Nadal, que le ha restado importancia al hecho de que haya sido suyo, por primera vez en una final, el punto decisivo para la victoria, ha dicho que "la felicidad es muy similar cuando lo gana otro".
"Esto es un equipo, es una tarea de todos y hemos trabajado mucho. Jugábamos en casa, era el último evento del año y ganar en tu país con el ambientazo que había en la pista es motivo de emoción y felicidad", ha destacado el número dos del mundo, quien también ha calificado este triunfo como "muy especial" al ser muy complicado que estén en el futuro los mismos componentes. "Esto da confianza e ilusión por seguir y estoy feliz por el año que he tenido, que ya era bueno pero ahora mejor. Un año duro e intenso", ha explicado.
Sobre el partido que le ganó a Del Potro, ha comentado que no le ha sorprendido la fortaleza del rival porque conoce su "categoría", por lo que ha sido "sorpresa relativa" lo complicado del partido.
"En general todo el equipo argentino es muy bueno y tuvimos que sacar todo lo mejor para superarlos", ha puntualizado Nadal, quien ha particularizado sobre Del Potro y ha destacado que "ya es un jugador muy bueno y claro candidato a ser el número uno. El año que viene estará entre los cuatro mejores del mundo y va a ser complicado pararlo si le respetan las lesiones".
El tenista balear, sobre si tiene esta final algo diferente a otras, ha apuntado que "es de las más especiales. La forma afecta y el ambiente. La de 2004 también porque fue la primera, pero con los años parece que uno valora más la dificultad de las cosas. Cuando eres joven no tienes la capacidad de apreciar la dificultad y ahora se valora mucho más".