Blatter quita hierro a los casos de racismo en el fútbol

Los jugadores que reciben insultos racistas durante los partidos deberían aceptar que es parte del ambiente de provocación y estrecharle la mano a su oponente al final del encuentro, según ha manifestado el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.

"Quizás algunos futbolistas tengan una palabra, un gesto hacia otro que no es el correcto", ha dicho Blatter en una entrevista a la cadena de televisión CNN, "pero para el que se vea afectado por eso, hay que decirle que es un juego, que estamos en un partido, y al final del encuentro debemos darnos la mano".

"En el terreno de juego, a veces dices cosas que no son muy correctas", continuaba el dirigente suizo, que ya había hecho unas declaraciones similares en otra entrevista a Al Jazeera, para añadir que "al final del encuentro todo ha pasado y tienes el próximo partido donde puedes comportarte mejor".

Estas declaraciones de Blatter se producen mientras la Federación Inglesa (FA) y la Policía investigan si John Terry, jugador del Chelsea y capitán de la selección de Inglaterra, profirió insultos racistas contra el defensa Anton Ferdinand, del Queens Park Rangers, y después de que la propia FA acusara, esta misma jornada, a Luis Suárez, delantero uruguayo del Liverpool, de insultos racistas hacia el francés Patrice Evra, del Manchester United.

Después de todo el revuelo, el propio Blatter matizaba sus declaraciones, a través de su cuenta en Twitter, asegurando que los comentarios se habían malinterpretado. "Lo que quise expresar es que, como futbolistas, durante un partido, tienes batallas con tus oponentes y a veces haces cosas equivocadas", decía el dirigente helvético, "pero normalmente, al final del partido, te disculpas con el oponente si tuviste algún enfrentamiento durante el partido, te das la mano, y cuando el juego termina, todo se acaba".

"Todo el mundo que haya jugado un partido de fútbol, o de cualquier otro deporte lo sabe", agregó. "Habiendo dicho esto, quiero subrayar que no quiero minimizar la dimensión del problema del racismo en la sociedad y en el deporte". "Estoy comprometido con la lucha contra esta plaga para echarla del fútbol", destacaba.