La selección brasileña de fútbol, en una noche inspirada del creativo Oscar, que marcó tres goles, ha conquistado su quinto Mundial en la categoría Sub'20 al superar por 3-2 a Portugal después de una prórroga de treinta minutos.
La final se repitió veinte años después pero esta vez sonrió a Brasil, que en 1991 cayó en una tanda de penaltis después de empatar sin goles en el tiempo reglamentario.
El héroe de la noche brasileña en Bogotá fue Oscar, quien marcó los tres goles del equipo dirigido por Ney Franco en los minutos 5, 78 y 111.
Portugal alimentó su esperanza de llegar al tercer título con las dianas de Alex en el minuto 9 y Nelson Oliveira en el 59.
El primer gol brasileño surgió de una falta ejecutada por Oscar. En medio del tumulto en el área el remate franco terminó rozando la cabeza de Nelson Oliveira y el portero Mika, resignado a recoger por primera vez en el torneo el balón en el fondo de la red. Pero el equipo de Ilidio Vale reaccionó de inmediato y a los 9 minutos consiguió la igualdad a través de Alex.
Los brasileños, un tanto sorprendidos, trataron de recuperar el control del juego y produjeron una peligrosa jugada en el área de Mika en la que el balón pegó dos veces en el palo y parecía que entraba al arco, pero el árbitro Mark Geiger, no lo consideró así.
De ahí en más el equipo de Ney Franco siguió presionando, buscando la ventaja, que no pudo encontrar tras la férrea defensa de los lusitanos. Fue solo hasta los últimos minutos del primer tiempo que Brasil volvió a tener el balón y en el minuto 44 el zaguero Juan tuvo una oportunidad al rematar a distancia por encima del horizontal.
En el segundo tiempo emergió el punta Nelson Oliveira como figura. El premio a su tenacidad llegó a los 59 minutos en una jugada en solitario por la derecha. Dejó atrás a la defensa y filtró el balón por entre las piernas del portero Gabriel. Nelson Oliveira continuó dando dolores de cabeza a la defensa del equipo Canarinho.
Brasil no renunció a atacar y en el minuto 78, tras un pase de Dudú, que ganó la espalda de Pelé, Oscar recogió un rebote defectuoso de Mika y fijó el 2-2 con el que ambos equipos, ahogados por el esfuerzo en una ciudad situada a 2.640 metros sobre el nivel del mar, se fueron al tiempo extra.
El recién ingresado Caetano tuvo la oportunidad de darle la ventaja a Portugal en el minuto 98 en una llegada solo frente a Gabriel, que contuvo un balón que iba en parábola.
En el minuto 111, un lanzamiento venenoso e inesperado de Oscar sorprendió a Mika, que no pudo contener su trayectoria hacia la escuadra. El juego acabó y Brasil festejó su quinto título mundial Sub'20, revirtiendo la historia 20 años después de que Portugal se impuso en una tanda de penaltis.