La UEFA ha abierto un procedimiento disciplinario contra el entrenador del Arsenal, Arsène Wenger, por romper supuestamente la sanción que le impedía comunicarse con su banquillo en el partido de ronda previa de la Champions contra el Udinese.
Las acciones contra Wenger se han iniciado por "no respetar la disciplina de la UEFA" durante el encuentro del pasado martes, contra el Udinese, según un comunicado de la organización europea. "La normativa indica que un entrenador no puede comunicarse con su equipo durante el partido en el cual está suspendido", subrayó la UEFA, mientras que Wenger, que vio el partido desde la grada del Emirates Stadium, habría enviado mensajes a su asistente, Pat Rice, que dirigía al equipo, a través de una tercera persona.
Wenger fue sancionado en el anterior partido que disputó el Arsenal en la Liga de Campeones, los octavos de final contra el FC Barcelona en el Camp Nou, cuando sus críticas al árbitro le costaron también 10.000 euros de multa. "No tenemos nada que esconder, estamos completamente abiertos a una investigación, porque no creo que hayamos hecho nada mal", ha afirmado el alsaciano en rueda de prensa.
El técnico del Arsenal ha admitido que nunca ha tenido claro "en qué consiste la suspensión de un entrenador" pero que, en todo caso, no se comunicó con su banquillo desde la grada. "Estoy bastante sorprendido de que necesiten iniciar una investigación sobre esto. Ellos nos dieron unas normas y nosotros las cumplimos estrictamente. Después del partido, o durante el partido, las normas cambiaron".
La UEFA tratará el "caso disciplinario" del técnico del Arsenal el próximo lunes 22, dos días antes de la vuelta de la ronda previa de la Champions ante el Udinese.