Alberto Contador se muestra satisfecho de su rendimiento en la décima etapa del Tour de Francia y asegura que, aunque al principio notó alguna molestia por las heridas que arrastra, notó que las piernas le respondieron bien. "Al principio me molestaba un poquito, pero he ido bien. Ha habido que estar atento al final del día porque se ha hecho un corte en el último puerto. Estaba un poquito atrás y he tenido que remontar, pero estoy contento porque eso significa que las piernas funcionan bien", afirmaba el madrileño al final de la etapa.
El corredor de Pinto destaca la importancia de haber superado una etapa de transición sin ningún problema importante. Contador quedó cortado en el kilómetro 14 de carrera a causa de una caída en la que se vieron afectados, entre otros, el suizo Fabian Cancellara, el holandés Robert Gesink y el estadounidense Levi Leipheimer, pero resta importancia al hecho. "Estábamos ahí prácticamente todos los favoritos, nos hemos quedado cortados. Pero no ha habido estrés porque estábamos prácticamente todos, los Schleck, Basso, Kloden, la mayoría. No ha habido nervios", comenta.
El madrileño asegura que muchos ciclistas le preguntan sobre el estado de su rodilla, pero lo considera normal a estas alturas de la competición en las que todos tienen golpes de la carrera.
Como ya hizo en la salida de Aurillac, Contador ha negado que esté pensando en retirarse, negando así la información publicada este mismo martes por el rotativo L'Équipe. "Voy a hacer todo lo posible por conseguir mi objetivo, que es luchar por la victoria en París. He pasado el día y eso es bueno para mi pierna porque no ha sido una etapa muy exigente, así que ahora me voy a recuperar y a pensar en mañana", dice en declaraciones que recoge Efe.
En cuanto a esa etapa, Contador asegura "es de los pocos días que quedan para recuperar, porque no es demasiado exigente" y se muestra confiado en "pasarla con tranquilidad y sin molestias en la rodilla".