Han sido muchas las veces que Rosell ha explicado, tanto en privado como en público, que no tirará la casa por la ventana para intentar fichar a Cesc Fabregas. El presidente Sandro Rosell ya ha dicho que la posibilidad de que el futbolista no acabe vistiendo la camiseta del Barça es bastante probable. Pero eso no significa que el club no vaya a hacer todo lo posible para intentar su fichaje.
El club tiene 45 millones para fichar más los que pueda sumar de las ventas de los futbolistas que el club no considera imprescindibles como Maxwell, Milito y otros jugadores de la cantera. De ahí no pasará, aunque excepcionalmente, como también dijo el presidente, si hubiera que poner más dinero sobre la mesa se pondría, pero no a cualquier precio.
Guardiola quiere jugadores comprometidos con el equipo. Busca futbolistas que se rebajen la ficha y, si fuera necesario, pusieran incluso dinero de su bolsillo para rebajarse la ficha. Este último ejemplo lo podemos encontrar en Javier Mascherano, que firmó la pasada temporada por 24 millones de euros, cuatro de los cuales fueron aportados por el propio jugador. Además, el argentino renunció a un 20% de su salario. Este sería el perfil que busca la entidad azulgrana. El mediocentro argentino, por otra parte, se negó a jugar la previa de la Champions con su equipo para poder hacerlo con el Barça. Hay un tope de 25 millones, aunque se podrían ampliar a 30, y, por supuesto, el catalán debería bajarse el salario. De ahí el Barça no se moverá.
El futbolista ha dado otro paso al frente y está dispuesto a rechazar el 15% que le correspondería de la cifra del traspaso que llegue a concretarse. No se trata de un gesto menor, puesto que el pellizco es importante. Tanto que ayuda mucho a convencer al Arsenal para que deje marcharse a su jugador franquicia. Por su parte, el Barça está al corriente del sacrificio que está dispuesto a hacer el centrocampista por cumplir su sueño, una postura que el club valora de forma muy positiva.
Por otro lado, llegado el caso de que fuera necesario, Cesc está dispuesto a utilizar el transfer request, una figura jurídica con la que el jugador pide al club ser vendido. El Arsenal justificaría, de esta manera, su traspaso ante la afición. Xabi Alonso echó mano de ella para dejar el Liverpool y fichar por el Real Madrid.