Cesc Fàbregas está como loco por vestir la camiseta del Barcelona la próxima temporada. Su agente, Darren Dean, ha llegado ya a un preacuerdo con los dirigentes del club azulgrana, que sigue haciendo encaje de bolillos para cuadrar las cuentas después de que el vicepresidente económico de la entidad, Javier Faus, reconociera este miércoles que sólo disponen de 45 millones de euros para poder fichar este verano.
Parece que el Barça sí podría hacerse con los servicios de Cesc por esa cantidad, aunque entonces debería olvidarse de sus otros dos grandes objetivos para la próxima temporada: el chileno Alexis Sánchez (Udinese) y el italiano Giuseppe Rossi (Villarreal). En cualquier caso, también espera poder obtener algún dinero con la venta de los jugadores transferibles, etiqueta que Pep Guardiola y el cuerpo técnico habría colgado a Bojan Krkic, Jeffren Suárez y Thiago Alcántara, entre otros.
En cualquier caso, parece que, esta vez sí, Cesc acabará jugando en el Barça. Y es que Arsène Wenger, el técnico del Arsenal, se muestra mucho menos reticente que en temporadas anteriores y acepta que su gran estrella pueda ser traspasada. Eso sí, nunca a un equipo de la Premier League.
Además, el futbolista de Arenys de Mar, que el pasado 4 de mayo cumplió 24 años, está dispuesto a rebajar sustancialmente sus emolumentos y cobrar menos dinero en el Barcelona que en el Arsenal. En este sentido, el diario Sport asegura que Cesc percibiría en el club culé dos millones de euros netos anuales menos que con los gunners. No obstante, también es consciente de que podría conseguir más títulos con el Barça que en la entidad londinense.
Según el rotativo catalán, Fàbregas también cuenta con ofertas de grandes clubes europeos como el Chelsea, Manchester City e Inter de Milán, pero él quiere fichar por el Barça a toda costa. Además, el diario inglés The Sun aseguró la semana pasada que el Real Madrid también estaría dispuesto a intentar su contratación para "herir al Barcelona".