Verdasco se mete en tercera ronda tras superar a Malisse

El español Fernando Verdasco, decimosexto favorito, ha superado al belga Xavier Malisse, por 4-6, 6-3, 7-6 (5) y 6-1, y se ha colocado en la tercera ronda de Roland Garros. El jugador madrileño se enfrentará ahora contra el veterano croata Ivan Ljubicic, que derrotó al estadounidense Sam Querrey, 24 favorito, por 7-6 (2), 6-4 y 6-4.

Poco antes, Robin Soderling se imponía a Albert Ramos por 6-3, 6-4 y 6-4, con más sufrimiento de lo que refleja el marcador, pues su rival peleó hasta el final. El sueco llevó siempre la iniciativa y supo conservar mejor su saque a pesar de las siete dobles faltas que cometió ante el barcelonés, que también estuvo muy agresivo con su servicio y conectó ocho aces.

Después de adjudicarse con relativa comodidad las dos primeras mangas, Soderling se puso al frente en el marcador del tercer set con 4-3, pero Ramos hizo un esfuerzo extra para recuperar el break con su única bola de rotura. Su arreón no sirvió de nada porque el sueco volvió a romperle el saque, pero dio una gran imagen.

Así, se despide de Roland Garros tras un partido en el que cometió 27 errores no forzados por los 24 de su rival y firmó 17 winners por 27 de Soderling. Finalmente, pagó su falta de continuidad en una campaña en la que no ha superado la segunda ronda en ningún torneo. El sueco, por su parte, espera rival del duelo entre el chipriota Marcos Baghdatis y el alemán Florian Mayer.

La número dos del mundo dice adiós

En el cuadro femenino, la belga Kim Clijsters, número dos del mundo, se ha unido a la lista de eliminaciones sorprendentes al caer ante la joven holandesa Arantxa Rus, por 3-6, 7-5 y 6-1, en un partido que tuvo dominado hasta la mitad del segundo set y que sentenció al cometer una doble falta en la tercera manga.

Clijsters, finalista en 2001 y 2003, acusó la falta de partidos en tierra batida después de una primavera marcada por la lesión de tobillo que sufrió en la boda de su primo. La joven Rus, por su parte, ya espera rival del duelo entre la rusa Maria Kirilenko y la sudafricana Chanelle Scheepers.