El testimonio de Paixao ya fue desestimado por la Justicia portuguesa en un proceso abierto en 2004 como fruto de una investigación policial.
Entre las pruebas rechazadas por la Justicia había unas grabaciones telefónicas en las que presuntos representantes del Oporto ofrecían favores sexuales y lujosos viajes a Marruecos a varios colegiados. La operación, bautizada entonces como Silbato Dorado, dejó al descubierto una trama de favores arbitrales al Oporto, dominador de la Liga por aquellos años.
Paixao ofrece en el vídeo los nombres de algunos de los implicados en la trama. El diario luso A Bola asegura que el testimonio es real y que responde a un intento de este ex árbitro por salvaguardar a su familia ante las presuntas amenazas recibidas
En concreto, Paixao asegura en el vído que su intervención jugó un papel decisivo en tres partidos de la Liga portuguesa: el Benfica-Moreirense (1-1, el 29 de febrero de 2004); el Oporto-Estela Amadora (2-0, el 24 de enero de 2004); y el Oporto-Académica (4-1, 4 de diciembre de 2002).