Emmanuel Adebayor se queja airadamente del arbitraje de Wolfgang Stark en el Real Madrid-Barcelona, de ida de semifinales de la Liga de Campeones (0-2).
"He jugado tres veces contra ellos y siempre tenemos que jugar con diez. Todo el mundo habla del fair play del Barcelona, pero creo que para nada hacen juego limpio. Con cualquier contacto en un cuerpo a cuerpo o en un balón dividido ellos van al suelo y lloran, poniéndose la mano en la cara", dice Manolito. "Su entrenador, su afición y los jugadores del banquillo están siempre llorando. El Barcelona es un club fantástico, con fantásticos jugadores, pero tiene que parar eso", añade.
"Cada vez que juegas contra el Barça, cada vez que les tocas, se van al suelo y lloran como un bebé", asegura el delantero africano sobre el comportamiento de los azulgrana en el césped.