A Sergio Busquets le gusta que le llamen Sergio. En su camiseta pone "Sergio". No "Sergi".
Todavía quedan españoles en Catalulña, por más que les fastidie a los que a los catalanistas y a los españoles que tienen manía a los catalanes porque piensan que todos son catalanistas.
Sin el español y catalán Sergio Busquets, la Selección española no habría ganado el Mundial. Sin Sergio Busquets el Barcelona no habría ganado la Copa de Europa en 2009, ni estaría a punto de conseguir su tercera liga consecutiva.
Y es tan "falsamente" humilde como Guardiola. Lo que más disgusta a los madridistas de Guardiola es que, pudiendo chulear, no lo hace.
Buen chaval y de los pocos humildes de este Barça.
Además es de los pocos jugadores del Barça que se sienten español, no como la mayoría de sus compañeros, mercenarios que solo se ponen la Roja para ganar dinero y títulos.