Colabora

Valencia y Villarreal encarrilan la eliminatoria de la Liga Europa

Valencia y Villarreal han dejado sentenciada la eliminatoria de la ronda previa de la Liga Europa frente al Stabaek noruego y el NAC Breda holandés, con sendas goleadas a domicilio por 0-3 y 1-3, mientras que el Athletic sufrió para derrotar al Tromsoe noruego en San Mamés (3-2).

El conjunto valenciano ejerció un dominio rotundo desde el inicio del encuentro, mientras el Stabaek apostó por el contraataque, ya que tuvieron complicaciones para seguir los continuos intercambios de posición entre Mata, Silva y Pablo, que se movían libremente por la frontal del área de los noruegos. Villa fue el más insistente pero se encontró con que Knudsen, el guardameta del Stabaek, respondió con unos efectivos reflejos a los que también se encomendó para salvar una potente volea de Pablo, aunque no pudo hacer nada cuando su rechace le cayó al extremo del Valencia, que marcó cómodamente al segundo intento.

Pablo Hernández se erigió como el jugador más activo y decisivo al volver a ser clave para que Villa dejara encarrilada la clasificación del Valencia a la fase de grupos de la Liga Europa gracias a un centro que el delantero asturiano se encargó de empujar a la red hábilmente. El Stabaek, a pesar del resultado desfavorable, sólo intentó reaccionar con ataques torpes y muy individualizados que desembocaban en prematuras pérdidas de balón.

El equipo entrenado por Unai Emery afrontó los últimos treinta minutos de enfrentamiento sin presión y se dedicó a realizar largas jugadas en el campo del conjunto noruego. Así, el Valencia todavía tuvo tiempo de marcar un tercer gol en la recta final gracias a la definición en el uno contra uno de Joaquín, que recriminó a Emery la reprimenda que anteriormente este le había dirigido por su falta de concentración en una jugada previa.

El Villarreal también hace los deberes

También ha cosechado un resultado muy amplio el Villarreal, tras vencer (1-3) en Breda frente al NAC holandés. El equipo español fue superior a lo largo del partido aunque sufrió en los primeros cuarenta y cinco minutos por el empuje y la agresividad del equipo local. La primera parte estuvo marcada por la incesante lluvia, que hizo que el Villarreal no se encontrara cómodo sobre el césped, que apenas permitía el juego de control y pase del equipo español.

El conjunto de Ernesto Valverde tuvo que jugar a ráfagas y los locales aprovecharon los errores en la entrega para crear peligro a la contra y a balón parado. Aún así, fueron los castellonenses los que con calidad se adelantaron al cuarto de hora en el marcador, gracias a una rápida jugada de Nilmar y Rossi, que supo definir muy bien el italiano desde la frontal del área con un certero disparo.

Poco duró la alegría, ya que, en la siguiente jugada, llegó la igualada por medio de Loran, al rematar por dos veces un centro desde la derecha en el interior del área. Este gol rompió el partido y ni un equipo ni otro lograron controlar la posesión clara del balón, lo que propicio un intercambio de golpes en el que se contabilizaron dos ocasiones muy claras para el Villarreal a disparos de Senna y Cazorla, por varios centros de los holandeses y un disparo de Schilder que pusieron el peligro para el Nac.

Los segundos cuarenta y cinco minutos comenzaron con un gol a los tres minutos de Ibagaza, que sacó una falta cuando los holandeses colocaban la barrera sin que el jugador argentino la hubiera pedido. El tanto tranquilizó los ánimos y el Villarreal se limitó a no complicarse la vida y esperar alguna opción para sentenciar. En la recta final del choque, Llorente aprovechó una de las salidas a la contra de su equipo ajustando un balón con la cabeza cerca del palo derecho de la portería del Ten Rowelaar, lo que sentenció el encuentro y casi la eliminatoria.

Llorente culmina la remontada del Athletic

La jornada la cerró el Athletic, que tuvo que remontar unmarcador que se le llegó a poner en contra en dos ocasiones ante el Tromsoe. De inicio, Joaquín Caparrós apostó por los jóvenes que han ilusionado a la afición rojiblanca esta pretemporada, Óscar de Marcos e Iker Muniain, pero su elección no funcionó.

El equipo noruego amagó y amagó hasta que dio duro antes del descanso. Fue en la enésima acción peligrosa de Morten Moldskred, el acompañante de Sigurd Rushfeldt en el ataque visitante. Esta vez un tiro lejano raso al que dio velocidad el mojado césped de San Mamés y al que Iraizoz no respondió como debía. Previamente, ni Yeste ni Ocio fueron capaces de pararle en un salida desde la banda hacia el centro, desde donde chutó.

En la segunda parte, el Athletic salió decidido a acosar al rival en busca de igualar el partido y, si se daba la oportunidad, remontarlo. No obstante, todavía le dio un pequeño susto al principio Moldskred. A partir de ahi, ya casi todo lo que ocurrió fue en la mitad de campo del Tromsoe. Para empezar, Javi Martínez transformó un penalti del que él mismo había sido objetivo; después otro penalti, clarísimo, a Llorente no señalado; y más tarde un par de ocasiones de Toquero, recién salido, abortadas por el meta visitante.

En medio del fragor de la batalla que se estaba dando en el otro lado del terreno de juego, Lindpere tuvo la clarividencia de incidir en el punto débil de Iraizoz, los tiros de lejos ajustados a los palos, para poner el 1-2. Ya con el partido casi perdido, tuvo que aparecer otra vez un chaval, esta vez De Marcos, para salvar los muebles. Lo hizo con una gran acción individual, una jugada hasta el vértice del área que terminó con un tiro cruzado con efecto. Aún les quedaba más a los de Caparrós, que encontraron un cabezazo salvador de Llorente, a perfecto centro con la izquierda de Toquero, para evitar volver a verse al borde del precipicio.

 

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario