El equipo bilbaíno se adelantaba en dos jugadas a balón parado de Fran Yeste y, cuando parecía que tenía todo hecho, recibía un gol al inicio del tiempo añadido que le complicaba sobremanera los últimos instantes del choque. Aunque Iraizoz y Yeste han sido dos de las piezas del conjunto rojiblanco, también han tenido mucho que ver en el éxito de los de Joaquín Caparrós los jóvenes de los que ha echado mano el técnico sevillano. Entre ellos, Markel Susaeta, el mejor del partido aparte del portero Iraizoz; De Marcos, que ha sido titular y ha debutado con sólo 20 años; e Iker Muniain, el chaval de 16 años en el que tantas esperanzas tiene la entidad vasca. Este último fue el que marcaba el segundo y definitivo tanto para la resolución de la eliminatoria.
De inicio sólo una novedad entre los dos equipos respecto al partido de ida, la de Óscar De Marcos en la alineación del Athletic. El joven delantero alavés suplió a Orbaiz para que Yeste centrase su posición y ocupar él la banda izquierda. La hierba artificial del campo suizo, la gran preocupación visitante para el partido, justificó el temor que se le tenía en Bilbao, ya que llevó a Aitor Ocio y a Iraizoz a dos errores que a punto estuvieron de costarle caros a su equipo. El central en la circulación de balón y el portero, en un control. Pero ni Doumbia, que tiró alto en buena posición en la primera jugada, ni Hochstrasser, con un lanzamiento muy lejano en la segunda, pudieron aprovecharlos.
Todavía tuvo un par de sustos más en el primer cuarto de hora del choque, con sendos disparos de Hochstrasser en muy posiciones muy peligrosas. El primero lo desvió a córner Iraizoz y el segundo dio en Aitor Ocio cuando se colaba hacia la red. Recuperó entonces resuello el Athletic, que había apostado desde el comienzo por la posesión de la pelota y un fútbol más combinativo de lo habitual. Desde su primer disparo con ciertas opciones, a cargo de Susaeta, ganó confianza. Hasta el punto de que empezó a llegar con peligro a la meta local.
Así, De Marcos, en una espectacular volea, volvió a meter el miedo en el cuerpo a Wölfli, y, en el minuto 26, Llorente adelantó a su equipo. Fue en uno de sus inapelables cabezazos en jugadas de estrategia. Yeste le había puesto el balón perfecto. Dos buenas ocasiones por bando dieron paso al descanso. Las de los locales de Doumbia y Mardassi. Las del Athletic fueron una espectacular colada con disparo alto de Javi Martínez y una contra de tres contra tres mal acabada.
Un centro de Degen y una jugada personal de Susaeta parecieron avanzar un segundo tiempo parecido al primer, pero no fue así. El choque se endureció por varias entradas locales que pudieron suponer más tarjetas de las que mostró el colegiado. Llegado al último cuarto de partido, y después de un paradón de Iraizoz a Doumbia al que el navarro amargó la noche, Muniain marcó el segundo gol del Athletic, el tanto a la postre definitivo en la resolución de la eliminatoria. El juvenil navarro aprovechó un balón suelto en el área tras un córner lanzado por Yeste y enganchó una volea certera e incontestable para el meta local.
Todavía debió sufrir lo suyo el conjunto bilbaíno, que vio cómo Sutter pudo poner el 1-2 en el minuto 81 y cómo definitivamente lo marcó Frimpong en el 91, cinco antes del agónico final. No pasó la cosa a mayores para el Athletic y el equipo rojiblanco estará en el bombo del sorteo de la ronda de 'play off' de la Europa League, que se llevará a cabo este viernes en Nyon (Suiza).
Ficha técnica del partido
BSC Young Boys, 1: Wölfli; Ghezal, Dudar, Mardassi; Sutter (Pasche, m.78), Hochstrasser (Trahore, m.80), Yapi, Degen; Marco Schneuwly, Doumbia y Regazzoni (Frimpong, m.74)
Athletic Club, 2: Iraizoz; Iraola, Aitor Ocio, Amorebieta, Castillo; Susaeta (Muniain, m.70), Javi Martínez, Yeste (Gurpegui, m.86), De Marcos (Orbaiz, m.80); Toquero y Llorente
Goles: 0-1, m.26: Llorente; 0-2, m.72: Muniain; 1-2, min.91: Frimpong
Árbitro: Alon Yefet (Israel). Expulsó a Yapi por doble amonestación (ms.45 y 95). Además, mostró tarjeta amarilla a Mardassi (m.31) y Degen (m.33), del Young Boys; y a Castillo (m.48), del Athletic
Incidencias: Partido de vuelta de la tercera ronda previa de la Europa League disputado en el estadio Suisse Wankdorf ante unos 25.000 espectadores, entre ellos unos 200 seguidores del Athletic. Terreno de juego de hierba artificial, duro y rápido. El equipo bilbaíno, que en la ida lo hizo de azul y blanco, jugó esta vez con su indumentaria habitual, con camiseta rojiblanca y pantalón negro