L D (EFE) Aunque Rafa Benítez se ha mostrado conforme con la duración y el salario ofrecido por los dueños de la entidad, Tom Hicks y George Gillett, el técnico se ha negado a comprometerse con el actual líder de la "Premier" por su desacuerdo a las condiciones relativas a los fichajes. Benítez exige mayor peso en la toma de decisiones relacionadas con la plantilla y con la adquisición de nuevos jugadores.
Hicks ha señalado que tanto él como su socio se reunirán con Benítez a finales de este mes y que en su encuentro confían en resolver sus diferencias. Según parece deducirse, Benítez pretende evitar que se repita la situación vivida con el jugador del Aston Villa, el medio inglés Gareth Barry, en quien estaba interesado el técnico español. "A Rafa le frustra el tiempo que lleva el que sucedan algunas cosas. Está simplemente tratando de posicionarse para hacer un mejor trabajo", ha observado Hicks en una entrevista concedida al canal británico Sky Sports News TV.
El estadounidense ha apuntado, además, que, en el fútbol inglés, "hace falta hacer algunos ajustes y trabajaremos para resolverlos. Podemos arreglarlo". Ha anticipado que tanto él como su socio se reunirán con Rafa Benítez "el 30 o 31 de enero" para hablar de los "pormenores de los requerimientos" del técnico español, que incluyen, también, "más inversiones en la cantera".
Con confianza, el norteamericano ha instado a los aficionados a "ser optimistas" con relación a la situación del "míster". "Rafa quiere ser el entrenador y será el entrenador. George (Gillett) y yo trabajaremos con los abogados para que esto pueda resolverse y no estoy en absoluto preocupado", ha enfatizado. "(Los aficionados) Deberían relajarse. Rafa va a seguir en el Liverpool durante los próximos cinco años y vamos a tratar de solucionar todos los pequeños problemas", ha agregado.