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El Sevilla supera el trámite del botellazo ante el Betis y completa la nómina de semifinalistas de la Copa del Rey

No ha habido sorpresas ni goles en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe, donde Betis y Sevilla han disputado a puerta cerrada los 33 minutos que restaban del partido de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey. El conjunto sevillista ha hecho valer el gol marcado hace tres semanas por Kanouté en el estadio Ruiz de Lopera, en un encuentro que tuvo que suspendido por el botellazo a Juande Ramos, para unirse al Barcelona, Deportivo y Getafe en el sorteo de las semifinales, que tendrá lugar este jueves a mediodía.

L D (EFE)
Veinte días separan la imagen de aquella botella lanzada desde la grada del estadio bético que impactó sobre la cabeza de Juande Ramos de la desoladora fotografía que presentaba el estadio del Getafe. Aquel botellazo provocó el cierre del Ruiz de Lopera y la suspensión temporal de la eliminatoria, favorable al Sevilla gracias a un gol de Kanouté y que obligaba al Betis a marcar dos goles para acceder a semifinales.

Las gradas vacías del estadio getafense no ayudaron al Betis, que el pasado 28 de febrero, cuando aún tenía esperanzas con el 0-0 de la ida, contaba con una grada a su favor que podría intimidar a cualquier rival. Con el estadio huérfano de aficionados, y sin cuatro de los jugadores que participaron en el partido del botellazo, el Betis saltó al terreno de juego con la esperanza de lograr la hazaña de marcar dos goles en algo más de media hora. El Sevilla tampoco sacó a cuatro de los futbolistas que estuvieron en campo bético. Entre ellos Kanouté, que finalmente se quedó en la grada por unas molestias en el pubis.

 
Con este lioso guión, el Sevilla fue el que más intimidó desde el principio del extraño choque. Una acción del brasileño Daniel Alves, con caño incluido sobre Romero, fue desaprovechado por su compatriota Luis Fabiano, que mandó la pelota a la grada. La eliminatoria pudo terminar a los diez minutos de la reanudación. Los hombres de Juande Ramos no daban opción a los pupilos de Luis Fernández. Fruto del dominio sevillista llegó la mejor ocasión del duelo. Alfaro, solo delante de la portería defendida por Contreras, mandó el esférico al cuerpo del guardameta verdiblanco. Parecía el Sevilla el equipo que tenía que remontar la eliminatoria. Jugaba como si tuviera prisa, y ése fue el acierto de Juande Ramos. Hizo probar a Luis Fernández la medicina que el francés iba aplicar a sus jugadores para pasar a la penúltima ronda de la Copa. La presión y las ocasiones fueron para el conjunto que vestía de naranja. Juande convirtió esa medicina en un veneno para el Betis.

Poco a poco se fue apagando el encuentro, aunque las ocasiones se sucedían en la porterías de Contreras. Alfaro pudo volver a marcar, después Alves desperdició un claro contraataque, Puerta casi mete el segundo después de una internada por la banda izquierda y, finalmente, un gran disparo desde fuera del área del hiperactivo Alves estuvo a punto de elevar un nuevo tanto al apagado marcador del Coliseum. El Betis pagó su actitud en su viaje a Madrid. Sólo el brasileño Robert pudo poner emoción al duelo. Su chutazo desde fuera del área pudo crear algo de emoción en el repleto palco getafense. Undiano Mallenco añadió tres minutos al choque que sólo sirvieron para prolongar la agonía bética.


Ficha técnica del partido

Real Betis, 0: Contreras; Melli, Juanito, Rivas (Maldonado, m.84), Romero; Fernando, Miguel Ángel, Assuncao, Capi (Dani, m.74); Edu y Robert
Sevilla FC, 1: Cobeño; Dani Alves, Javi Navarro, Escudé, Dragutinovic; Alfaro (Chevantón, m.80), Poulsen, Martí, Maresca (Aitor Ocio, m.85); Puerta y Luis Fabiano

Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio navarro). Mostró tarjeta amarilla al sevillista Martí (m. 65) y a los béticos Rivas (m.74) y Maldonado (m.90)
Incidencias: Encuentro aplazado correspondiente a la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey disputado a puerta cerrada en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe. Vieron el encuentro desde el palco el presidente del club madrileño, Ángel Torres, acompañado por los máximos dirigentes del Betis y del Sevilla, Pepe León y José María del Nido, respectivamente. También presenció el partido el entrenador del Getafe, Bernd Schuster

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