(Libertad Digital) En el recuerdo sevillista estaba el 4-1 de la Liga y que eso demostraba que era posible eliminar a los galácticos pese al 2-0 adverso encajado en la ida del Bernabéu, hecho que fue ratificado cuando a los 39 segundos de juego Antonio López abrió el marcador y empezó a recorrer el camino pretendido por los locales.
Los de Joaquín Caparrós se mostraron con mucha fe frente a un Real Madrid que pareció no ponerse demasiado nervioso y que intentó marcar en esporádicas ocasiones, algo que prácticamente dejaría sentenciada la eliminatoria, pero el tanto no llegaba y sí los contragolpes locales. La presión sevillista fue enorme en el centro del campo, lo que impidió que Guti y Beckham organizaran bien los ataques y que Zidane y Figo, por las bandas, crearan opciones de peligro para Raúl y Ronaldo, por lo que el partido se encaminó a su descanso con las espadas en todo lo alto.
A la fase final de este período se entró con un conjunto, el de Carlos Queiroz, que sí encontró algunos espacios y que gozó de un par de claras ocasiones para batir a Esteban, pero que vio cómo se quedó sin Zidane al ser expulsado por Iturralde, tras consultar con su asistente Rafael Guerrero, quien vio un codazo del francés a Pablo Alfaro.
En la reanudación, con Raúl algo más retrasado para cubrir la ausencia de Zidane, el Madrid controló el juego con la intención de hacer valer el resultado de la ida y más aún cuando equilibraron los efectivos sobre el campo por la expulsión del local Javi Navarro. El Sevilla, muy desgastado físicamente, ya no tuvo el empuje de la primera mitad y el rival intentó aprovecharse para poner el 1-1 y dejar escrita ya la historia de la eliminatoria, aunque lo hizo con poca convicción y ello le dio incertidumbre al encuentro, ya que los locales pudieron sacar rendimiento de algún despiste de la zaga visitante. Pero el Sevilla no pudo más y el Real Madrid no pasó por demasiados apuros para plantarse en una final que la trabajó hasta el final.
Los de Joaquín Caparrós se mostraron con mucha fe frente a un Real Madrid que pareció no ponerse demasiado nervioso y que intentó marcar en esporádicas ocasiones, algo que prácticamente dejaría sentenciada la eliminatoria, pero el tanto no llegaba y sí los contragolpes locales. La presión sevillista fue enorme en el centro del campo, lo que impidió que Guti y Beckham organizaran bien los ataques y que Zidane y Figo, por las bandas, crearan opciones de peligro para Raúl y Ronaldo, por lo que el partido se encaminó a su descanso con las espadas en todo lo alto.
A la fase final de este período se entró con un conjunto, el de Carlos Queiroz, que sí encontró algunos espacios y que gozó de un par de claras ocasiones para batir a Esteban, pero que vio cómo se quedó sin Zidane al ser expulsado por Iturralde, tras consultar con su asistente Rafael Guerrero, quien vio un codazo del francés a Pablo Alfaro.
En la reanudación, con Raúl algo más retrasado para cubrir la ausencia de Zidane, el Madrid controló el juego con la intención de hacer valer el resultado de la ida y más aún cuando equilibraron los efectivos sobre el campo por la expulsión del local Javi Navarro. El Sevilla, muy desgastado físicamente, ya no tuvo el empuje de la primera mitad y el rival intentó aprovecharse para poner el 1-1 y dejar escrita ya la historia de la eliminatoria, aunque lo hizo con poca convicción y ello le dio incertidumbre al encuentro, ya que los locales pudieron sacar rendimiento de algún despiste de la zaga visitante. Pero el Sevilla no pudo más y el Real Madrid no pasó por demasiados apuros para plantarse en una final que la trabajó hasta el final.
Ficha técnica del partido
Real Madrid, 0: César; Míchel Salgado, Helguera, Raúl Bravo, Roberto Carlos; Figo, Guti, Beckham (Borja, m.90), Zidane; Raúl y Ronaldo (Solari, m.94)
Gol: 1-0, m.1: Antonio López
Árbitro: Iturralde González (Colegio vasco). Expulsó con roja directa al madridista Zidane (m.44) por darle un codazo a Pablo Alfaro y al sevillista Javi Navarro por dos tarjetas amarillas, que las vio en los minutos 25 y 53. Además, amonestó a los locales Julio Baptista (m.47), Redondo (m.86) y a los visitantes Helguera (m.74), Raúl (m.83), Míchel Salgado (m.85), Ronaldo (m.92) y César (m.94)
Incidencias: Partido de vuelta de semifinales de la Copa del Rey disputado en el Ramón Sánchez Pizjuán ante unos 45.000 espectadores que llenaron el estadio. Terreno de juego en buenas condiciones. El partido se retrasó unos diez minutos debido a la gran afluencia de espectadores a la hora fijada para su inicio