L D (EFE) Todos los aspirantes a albergar la Copa del Mundo, Suráfrica, Túnez, Egipto, Marruecos y Libia, han presentado este martes los proyectos en breves exposiciones ante el suizo Joseph Blatter, presidente de la FIFA; el suizo Urs Linsi, secretario general; y el máximo responsable del Grupo de Inspección para el Mundial 2010, el belga Jaan Peeters. Blatter asegura que "las candidaturas tienen que ser individuales", cuando fue propuesta por parte de Túnez la posibilidad de crear un proyecto conjunto con Libia. Ambos países se presentaron de manera individual, pero también mostraron su interés en hacerlo conjuntamente, hecho que fue rechazado de pleno, pese a que, como indicó Hamouda Ben Ammar, presidente de la Federación tunecina, se pretendía economizar dinero.
Libia, en cuya representación estuvo el hijo del líder libio Moamar Gadafi, Al-Saadi, futbolista profesional y vicepresidente de la Federación, también defendía el proyecto conjunto porque lo considera "realista". "La FIFA hizo una excepción para Corea del Sur y Japón, así que, ¿por qué no puede hacer con nosotros lo mismo?", se preguntaba Musa Shaibani, miembro del ejecutivo de la Federación libia, quien resaltó que este proyecto no provocaría problemas logísticos para el máximo organismo mundial y que el caso no es el mismo. La FIFA ya había hecho saber que estaba en contra de que un Mundial se dispute conjuntamente en dos países, después de comprobar las dificultades de organización y los incrementos de los gastos en el de Corea/Japón 2002, y hoy a vuelto a ratificarlo.
Los otros tres aspirantes, Suráfrica, Egipto y Marruecos, sí que presentaron sus proyectos como estaba previsto, mientras que Nigeria, el otro país que en principio iba a comparecer, renunció el lunes a hacerlo debido a problemas económicos, si bien mostró su apoyo a los surafricanos. Mientras tanto, Egipto rechazó la idea de que la situación de Oriente Medio pueda perjudicar su candidatura, y resaltó que la seguridad está garantizada. "Somos uno de los países más seguros del mundo", indicaba Hicham Azmy, coordinador del proyecto. "Desde 1997 hemos acogido conferencias de paz al más alto nivel e incluso hemos tenido al presidente de Estados Unidos de visita oficial. Todo ello no podría haberse organizado si no hubiera existido seguridad", apuntaba Azmy, quien agregaba que piensan contar con personas con experiencia en anteriores Mundiales para llevar a cabo un "proyecto de primera clase".
Mientras tanto, el ex futbolista ghanés Abedi Pele, tres veces Futbolista Africano del Año, mostraba su respaldo a la candidatura de Suráfrica. Suráfrica fue la encargada de abrir el fuego en el Auditorium Sonnenberg de la sede de la FIFA, que decidió hace un par de años que comenzase por Africa el principio de rotación entre las distintas confederaciones para albergar los Mundiales. El máximo organismo mundial inspeccionará in situ en los próximos meses (comenzarán del 7 al 14 de octubre en Marruecos y del 29 de octubre al 5 de noviembre en Suráfrica) los distintos países y elaborará un informe que será entregado al Comité Ejecutivo en abril de 2004, un mes antes de la elección definitiva de la sede (21 de mayo). Suráfrica puede partir como principal favorita, pues no en vano perdió por un voto ante Alemania para acoger el Mundial de 2006 cuando era la candidatura que parecía tener más opciones.
Marruecos, que aspira por cuarta vez a acoger un Mundial, ha elaborado una intensa campaña externa, con importantes apoyos, e interna, y cuenta como datos a favor su cercanía con Europa y su experiencia futbolística. "Soy uno de los que puso todo de su parte para que Africa, cantera de innumerables talentos, pudiese recibir un día a la Copa Mundial de la FIFA. El compromiso, la motivación y el dinamismo de los candidatos testimonian el formidable apasionamiento generado por el fútbol en Africa y justifican la decisión de la FIFA", comentaba el presidente de la FIFA. "Ha sido un gran día. Ansío estar ya sobre los terrenos de juego en compañía de los otros miembros del grupo de inspección de la FIFA. Tenemos ante nosotros una tarea fundamental y apasionante que sabremos desempeñar correctamente", declaraba Peeters.
Libia, en cuya representación estuvo el hijo del líder libio Moamar Gadafi, Al-Saadi, futbolista profesional y vicepresidente de la Federación, también defendía el proyecto conjunto porque lo considera "realista". "La FIFA hizo una excepción para Corea del Sur y Japón, así que, ¿por qué no puede hacer con nosotros lo mismo?", se preguntaba Musa Shaibani, miembro del ejecutivo de la Federación libia, quien resaltó que este proyecto no provocaría problemas logísticos para el máximo organismo mundial y que el caso no es el mismo. La FIFA ya había hecho saber que estaba en contra de que un Mundial se dispute conjuntamente en dos países, después de comprobar las dificultades de organización y los incrementos de los gastos en el de Corea/Japón 2002, y hoy a vuelto a ratificarlo.
Los otros tres aspirantes, Suráfrica, Egipto y Marruecos, sí que presentaron sus proyectos como estaba previsto, mientras que Nigeria, el otro país que en principio iba a comparecer, renunció el lunes a hacerlo debido a problemas económicos, si bien mostró su apoyo a los surafricanos. Mientras tanto, Egipto rechazó la idea de que la situación de Oriente Medio pueda perjudicar su candidatura, y resaltó que la seguridad está garantizada. "Somos uno de los países más seguros del mundo", indicaba Hicham Azmy, coordinador del proyecto. "Desde 1997 hemos acogido conferencias de paz al más alto nivel e incluso hemos tenido al presidente de Estados Unidos de visita oficial. Todo ello no podría haberse organizado si no hubiera existido seguridad", apuntaba Azmy, quien agregaba que piensan contar con personas con experiencia en anteriores Mundiales para llevar a cabo un "proyecto de primera clase".
Mientras tanto, el ex futbolista ghanés Abedi Pele, tres veces Futbolista Africano del Año, mostraba su respaldo a la candidatura de Suráfrica. Suráfrica fue la encargada de abrir el fuego en el Auditorium Sonnenberg de la sede de la FIFA, que decidió hace un par de años que comenzase por Africa el principio de rotación entre las distintas confederaciones para albergar los Mundiales. El máximo organismo mundial inspeccionará in situ en los próximos meses (comenzarán del 7 al 14 de octubre en Marruecos y del 29 de octubre al 5 de noviembre en Suráfrica) los distintos países y elaborará un informe que será entregado al Comité Ejecutivo en abril de 2004, un mes antes de la elección definitiva de la sede (21 de mayo). Suráfrica puede partir como principal favorita, pues no en vano perdió por un voto ante Alemania para acoger el Mundial de 2006 cuando era la candidatura que parecía tener más opciones.
Marruecos, que aspira por cuarta vez a acoger un Mundial, ha elaborado una intensa campaña externa, con importantes apoyos, e interna, y cuenta como datos a favor su cercanía con Europa y su experiencia futbolística. "Soy uno de los que puso todo de su parte para que Africa, cantera de innumerables talentos, pudiese recibir un día a la Copa Mundial de la FIFA. El compromiso, la motivación y el dinamismo de los candidatos testimonian el formidable apasionamiento generado por el fútbol en Africa y justifican la decisión de la FIFA", comentaba el presidente de la FIFA. "Ha sido un gran día. Ansío estar ya sobre los terrenos de juego en compañía de los otros miembros del grupo de inspección de la FIFA. Tenemos ante nosotros una tarea fundamental y apasionante que sabremos desempeñar correctamente", declaraba Peeters.