Ante las últimas medidas antitaurinas en varios 'ayuntamientos del cambio', Enrique Ponce ha valorado lo ocurrido este jueves en San Sebastián, donde participó como matador y se reivindicaron las corridas de toros. El torero dijo que "el triunfo llegó antes de la corrida" por volver a estar en una plaza que "había estado vetada por una sinrazón política". En opinión de Ponce, "el político que cierra una plaza es mucho peor", es "una especie de dictadura que cohíbe la libertad y la democracia".
Tras celebrar "la gran tarde" vivida, tanto por el festejo como por el hecho en sí de volver a estar en San Sebastián, agradeció el apoyo del rey Juan Carlos. "Es nuestra historia, aunque no lo quieran. Hay gente a la que no le gusta y yo lo respeto. Yo pienso de otra manera. Ahí radica el respeto, la democracia y la libertad", ha dicho.
Ponce ha calificado de "ridículas" medidas como calificar a Palma de Mallorca como antitaurina y ha manifestado que tienen estos gestos porque no poseen un "proyecto electoral". "No saben por dónde tirar y lo primero que hacen es prohibir" o "cambiar el nombre de las calles", ha opinado, antes de pedir "un respeto a nuestra tradición" y "a nuestra historia".
En opinión de Ponce, hay que empezar "a tomarnos muy en serio este tema" porque "no se puede prohibir una actividad que es totalmente legal". "Tendremos que juntarnos, hablar con los políticos que tengamos que hablar y manifestarnos un poquito", ha indicado antes de recordar "todo lo que genera la tauromaquia".
El torero también ha recordado que acabar con las corridas supondría "sepultar una especie que es el toro bravo, bella y única, a la que todos respetamos. Mucho más que ellos".