El taurino Jesús Sánchez Encinar, Jesús Mulero, descubridor de Antonio Corbacho, que a su vez lanzó a José Tomás, ha fallecido este sábado en Madrid a los 74 años víctima de una larga enfermedad, han informado a Efe fuentes familiares.
Muy querido y respetado por el mundo del toro debido a la bohemia con la que no sólo llevó a cabo su actividad profesional, sino también su vida personal, Mulero fue también un hombre generoso y un taurino polifacético donde los haya.
Mulero siempre fue un romántico del toreo. Forjado en las capeas, donde comenzó a hacerse un hueco en la profesión, este gran taurino abulense (nació en Pozanco) llegó a ser novillero, pasando a ser posteriormente subalterno para acabar ejerciendo otro tipo de actividades, siempre ligadas con el toro.
Como apoderado, además de echar una mano a los que siempre pedían su ayuda, llevó las carreras de Antonio Corbacho, Pepín Jiménez, Morenito de Jaén, el ecuatoriano Guillermo Albán o el mexicano Carlos Rondero.
Pero también fue hombre de empresa, llegando a ser empresario de la madrileña Plaza de Vista Alegre, y hombre confianza muy admirado por todos los profesionales del toreo. Los restos mortales de Jesús Mulero descansan en el tanatorio Sur de Madrid, y recibirán sepultura mañana a primera hora de la tarde en el cementerio de La Almudena, también en la capital de España.